La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, opinó este martes que el permiso de Estados Unidos a Ucrania para usar misiles de largo alcance contra Rusia es “una respuesta a la agresividad sin precedentes de los últimos días” de Moscú.
“Esta elección es una respuesta a una agresividad sin precedentes que hemos visto estos días por parte de Rusia”, dijo la mandataria italiana ante los medios al margen de su participación en la cumbre en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
Meloni apuntó que esta “agresividad” rusa, que no detalló, se da “justo en la víspera” de la cumbre, en la que el país invasor participa, lo que, a su parecer “traiciona su voluntad de diálogo”.
No obstante, la primera ministra recordó que Italia ha “tomado otras decisiones” en su apoyo a Kiev, concentrándose en “el tema de la defensa aérea y de las poblaciones civiles”.
“Nosotros hemos garantizado y garantizamos nuestro apoyo a Ucrania”, refirió.
Meloni, este año presidenta de turno del G7, abogó por mantener el “frente occidental”, más allá de lo que pueda ocurrir cuando regrese Donald Trump a la Casa Blanca, y restó importancia a la conversación telefónica entre el canciller alemán, Olaf Scholz, con el presidente ruso Vladimir Putin.
“Creo que todos se dan cuenta de cuál es la razón del conflicto ucraniano y creo que, a día de hoy, no se da una disponibilidad de Rusia a dialogar. No es la primera vez que un líder occidental, que claramente apoya a Ucrania, habla con Vladimir Putin, ha ocurrido desde el comienzo del conflicto”, dijo.
Sus palabras se producen poco después de que el Ministerio de Defensa ruso haya confirmado el primer ataque ucraniano con misiles balísticos de fabricación estadounidense, de los que cinco fueron derribados y un sexto impactó en la región fronteriza de Briansk sin causar daños.
El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, ha permitido a Kiev usar misiles de largo alcance estadounidense contra objetivos en Rusia para defender sus posiciones en la región rusa de Kusrk, donde el ejército de Putin cuenta con apoyo de tropas de Corea del Norte.
El Ministerio de Defensa de Rusia anunció que en la madrugada del domingo, la región de Bryansk fue atacada con seis misiles balísticos ATACMS, de los cuales cinco fueron derribados por sistemas de defensa aérea, mientras que el sexto resultó dañado.
“El enemigo (por Ucrania) atacó un objeto en el territorio de la región de Bryansk con seis misiles balísticos a las 03:25. Según datos confirmados, se utilizaron misiles tácticos operacionales ATACMS. Las tripulaciones de los sistemas de defensa aérea S-400 y Pantsir derribaron cinco misiles y dañaron otro”, declaró el Ministerio según informó la agencia TASS.
El impacto de los fragmentos del misil dañado provocó un incendio en una instalación militar de la región, que fue controlado rápidamente. “No hubo víctimas ni destrucción significativa”, añadieron las autoridades.
Previamente, el Estado Mayor ucraniano había informado, sin dar detalles del armamento utilizado, sobre un ataque exitoso contra un arsenal del Ejército ruso en Briansk.
La confirmación del uso de los misiles tácticos ATACMS, llega tras el anuncio del Kremlin este martes sobre la firma por parte de Vladimir Putin de un decreto que permite a Moscú utilizar armas nucleares contra un Estado no nuclear si este cuenta con el respaldo de potencias atómicas.
La escalada de tensiones coincide con el día 1000 de la ofensiva rusa en Ucrania y llega poco después de que Estados Unidos aprobara el uso de misiles de largo alcance por parte de Ucrania para atacar objetivos militares dentro del territorio ruso.
El Kremlin expresó su rechazo por la decisión de Washington, calificándola de “imprudente” y asegurando que habrá una respuesta de Moscú.
(Con información de EFE)