Al menos 11 personas murieron y otras 89 resultaron heridas en la ciudad ucraniana de Sumy por el impacto de un misil ruso contra un edificio de viviendas, según informaron en redes sociales las autoridades locales.
La primera dama ucraniana, Olena Zelenska, condenó el ataque y explicó que entre las víctimas mortales hay dos niños.
“Es un ataque no sólo contra los ucranianos sino contra el concepto mismo de humanidad. Y contra todos los que creen que al enemigo puede parársele con concesiones en vez de por la fuerza”, escribió Zelenska en su cuenta de la red social X.
Según los servicios de emergencia ucranianos, entre los heridos hay once menores de edad.
El ataque se produjo horas después de masivos bombardeos rusos que dejaron al menos 11 muertos y una veintena de heridos y dañaron severamente la infraestructura energética del país.
El presidente Volodimir Zelensky destacó que los ataques rusos con misiles y drones han destruido “la mitad de la capacidad de producción energética” del país, lo que agrava los retos para afrontar el invierno. Los déficits energéticos ya dificultan los preparativos ante las bajas temperaturas, según informó el gobierno ucraniano.
El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, dijo este domingo que “Ucrania necesita más defensa aérea”, después del ataque ruso contra la infraestructura energética del país con 120 misiles y 90 drones.
“Rusia lanzó hoy un ataque masivo con misiles y drones, aterrorizando a civiles en toda Ucrania y apuntando específicamente a la infraestructura energética, incluida la nuclear, antes del invierno”, señaló el jefe de la diplomacia europea en un mensaje en redes sociales.
Borrell también afirmó que la necesidad de más defensa aérea por parte de Ucrania será la “prioridad” que tratará en el próximo Consejo de Asuntos Exteriores de Defensa que tendrá lugar el martes en Bruselas.
El ataque ruso también se da un contexto en el que el presidente Joe Biden, según medios de EEUU, ha autorizado por primera vez el uso de misiles de largo alcance suministrados por Estados Unidos por parte de Ucrania para atacar dentro de Rusia.
La decisión representa un importante cambio en la política de Estados Unidos y se produce cuando Biden está a punto de dejar el cargo y el presidente electo entrante, Donald Trump, ha dicho que pondría fin rápidamente a la guerra y ha expresado escepticismo sobre el continuo apoyo de Estados Unidos.
Es probable que las armas se utilicen en respuesta a la decisión de Corea del Norte de enviar miles de tropas a Rusia en apoyo a la invasión de Ucrania por parte del presidente ruso Vladímir Putin, según una de las personas. El funcionario y las personas familiarizadas con el asunto no estaban autorizados para discutir la decisión públicamente y hablaron bajo condición de anonimato.
Zelensky y muchos de sus partidarios occidentales han estado presionando a Biden durante meses para permitir que Ucrania ataque objetivos militares dentro de Rusia con misiles suministrados por Occidente, diciendo que la prohibición estadounidense había hecho imposible para Ucrania intentar detener los ataques rusos a sus ciudades y redes eléctricas.
Algunos partidarios han argumentado que esta y otras restricciones estadounidenses podrían costarle la guerra a Ucrania. El debate se ha convertido en una fuente de desacuerdo entre los aliados de la OTAN de Ucrania.
Biden se había mantenido en contra, decidido a mantener la línea contra cualquier escalada que él sentía podría arrastrar a Estados Unidos y otros miembros de la OTAN a un conflicto directo con Rusia.
Pero Corea del Norte ha desplegado miles de efectivos en Rusia para ayudar a Moscú a intentar recuperar tierras en la región fronteriza de Kursk que Ucrania se apoderó este año. La introducción de tropas norcoreanas en el conflicto se produce mientras Moscú ha cobrado ímpetu. Trump ha señalado que podría presionar a Ucrania para que acceda a ceder algunas tierras tomadas por Rusia para encontrar un fin al conflicto.
Según evaluaciones de Estados Unidos, Corea del Sur y Ucrania, se han enviado hasta 12.000 tropas norcoreanas a Rusia. Funcionarios de inteligencia de Estados Unidos y Corea del Sur dicen que Corea del Norte también ha proporcionado a Rusia cantidades significativas de municiones para reponer sus menguantes arsenales de armas.
Trump, quien asume el cargo en enero, habló durante meses como candidato sobre su deseo de que la guerra de Rusia en Ucrania terminara, pero en su mayoría evadió preguntas sobre si quería que Ucrania, aliado de Estados Unidos, ganara.
También criticó repetidamente a la administración de Biden por dar decenas de miles de millones de dólares en ayuda a Kiev. Su victoria electoral tiene a los partidarios internacionales de Ucrania preocupados de que cualquier acuerdo apresurado beneficiaría principalmente a Putin.
(Con información de AFP y AP)