Corea del Sur, Japón y Estados Unidos finalizaron este viernes una serie de maniobras militares conjuntas, denominadas ‘Freedom Edge’, en respuesta al creciente riesgo de seguridad en Asia-Pacífico y a la estrecha cooperación militar entre Corea del Norte y Rusia, que incluye el envío de soldados norcoreanos a Ucrania para apoyar a Moscú.
Los ejercicios de tres días, realizados en aguas internacionales alrededor de la isla surcoreana de Jeju, se orientaron a fortalecer la defensa conjunta y la estabilidad en la región.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur (JCS) destacó que las maniobras tenían como objetivo “defender la paz y la estabilidad en la Península Coreana y la región en medio de crecientes amenazas a la seguridad”, haciendo alusión al reciente lanzamiento de un misil balístico intercontinental (ICBM) por parte de Corea del Norte y a su alianza militar con Rusia.
Este ejercicio refuerza el acuerdo alcanzado en 2023 por los líderes de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur para mejorar la cooperación en defensa y responder a las amenazas regionales.
Las maniobras movilizaron una importante cantidad de recursos militares de las tres naciones. Entre ellos, el portaaviones USS George Washington de la Armada estadounidense, el destructor ROKS Seoae Ryu Seong-ryong de Corea del Sur, y el destructor JS Haguro de Japón, que navegaron juntos en una demostración de interoperabilidad y compromiso mutuo.
Según el Ministerio de Defensa japonés, el ejercicio buscaba “demostrar la firme voluntad de Japón, Estados Unidos y Corea del Sur de promover la interoperabilidad y proteger la libertad para la paz y la estabilidad del Indo-Pacífico, incluida la península de Corea”.
Este es el segundo ejercicio ‘Freedom Edge’ en el año, luego de una primera ronda realizada en junio. Corea del Norte reaccionó enérgicamente ante estos ejercicios conjuntos, advirtiendo que tales “actos provocativos” tendrían “consecuencias fatales”.
Sin embargo, las tres naciones reafirmaron su compromiso de mantener una postura defensiva y han incrementado su coordinación en respuesta a las continuas pruebas de misiles por parte del régimen de Kim Jong-un.
La primera ronda de ejercicios ‘Freedom Edge’ fue en junio de 2023, tras un acuerdo firmado por las tres naciones. En esa ocasión, el régimen de Corea del Norte reaccionó declarando que los “actos provocadores” de los ejercicios militares trilaterales tendrían “consecuencias fatales”.
Crecen las tensiones entre el régimen de China y Japón
Por otro lado, el acercamiento del régimen de China a Rusia desde la invasión de Ucrania empeoró las relaciones de Beijing con Tokio. Japón protestó reiteradamente ante las crecientes maniobras militares chinas cerca del archipiélago nipón, a menudo en colaboración con Moscú.
En agosto, el espacio aéreo japonés fue violado por China por primera vez, lo cual llevó a las Fuerzas Aéreas de Autodefensa de Japón a responder con maniobras de despegue rápido.
Ante el aumento de tensiones, Japón y Corea del Sur preparan posibles encuentros bilaterales entre sus líderes y el presidente de China, Xi Jinping, en el marco de la Semana de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que se realiza en Lima, Perú, y en la cumbre del G20 en Brasil.
(Con información de EFE)