Un hallazgo monumental ha emergido del océano Pacífico. Científicos han descubierto el coral más grande del mundo, situado en el suroeste del océano. Este megacoral mide más de 30 metros de largo, lo que equivale a más de 98 pies y tiene al menos 300 años de antigüedad. Lo que lo hace aún más impresionante es su visibilidad desde máximas alturas. Según CNN, “El coral es tan colosal que era posible verlo desde el espacio”.
La expedición que condujo a este descubrimiento fue organizada por el programa Pristine Seas de National Geographic, el cual fue lanzado en octubre con el propósito de investigar la salud del océano en las Islas Salomón. El coral es notable no solo por su tamaño, sino también por ser un único ejemplar, diferente a los arrecifes que consisten en múltiples colonias. Como destacó Enric Sala, explorador residente de National Geographic y fundador de Pristine Seas, quien compartió con CNN, “Encontramos un coral enorme formado por casi mil millones de pequeños pólipos, repleto de vida”.
Este sorprendente hallazgo ha despertado el interés en torno a su potencial impacto en el turismo y la ciencia en las Islas Salomón. Según CNN, Dennis Marita, director de cultura del país en el Ministerio de Cultura y Turismo, comentó que para la nación, “Esto es algo enorme para nuestra comunidad”.
El relato del descubrimiento también inspira reflexión sobre las condiciones actuales del medio ambiente marino. A pesar de su ubicación remota, los corales están amenazados no solo por el calentamiento global sino también por acciones humanas como la sobrepesca y la contaminación, que afectan el equilibrio de sus ecosistemas.
El coral alberga además una gran biodiversidad marina, actuando como hogar para peces, cangrejos y camarones, y funcionando como una verdadera enciclopedia viviente de la historia del océano. De acuerdo con CNN, Manu San Félix, biólogo marino y cineasta submarino, expresó al medio que “La supervivencia de este coral, que tiene cientos de años, ilustra que no todo está perdido para los arrecifes de coral”.
Sin embargo, el gozo del descubrimiento está empañado por un llamado a la acción frente al cambio climático, un tema que se discute actualmente en la COP29 en Bakú, Azerbaiyán. Emily Darling de la Wildlife Conservation Society manifestó a CNN su percepción de esperanza, indicando que el coral “demuestra que todavía hay condiciones ambientales en las que los corales pueden sobrevivir y prosperar, incluso potencialmente a través de los impactos acelerados del cambio climático”.
La salud y longevidad de este coral específico brindan un poco de optimismo en medio de una avalancha de malas noticias sobre la amenaza a los corales en general, especialmente aquellas que enfrentan un blanqueamiento masivo global, como informó recientemente la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA). Según CNN, Derek Manzello de Coral Reef Watch de la NOAA afirmó que “La supervivencia actual de los corales... está en peligro”.
El hallazgo del megacoral no solo acentúa la necesidad de conservar nuestros océanos, sino que resalta la responsabilidad de los países más ricos de invertir significativamente en la reducción de emisiones de carbono. Como mencionó Enric Sala a CNN, “El hallazgo de este nuevo coral, que ya está en riesgo, es un fuerte recordatorio más de la necesidad de que los países ricos gasten muchos más recursos en reducir nuestras emisiones de carbono”.