- Irán considera modificar su doctrina de uso civil de energía nuclear para defensa.
- El líder supremo Khamenei y otros funcionarios sugieren que la fatua de 2003 podría adaptarse.
- Tensión crece tras recientes ataques israelíes y avances nucleares iraníes.
Lo esencial: Irán insinuó un cambio en su doctrina nuclear tras los ataques israelíes y la escalada de violencia en la región. El portavoz del Ministerio de Exteriores, Ismail Baghaei, dejó abierta la posibilidad de reconsiderar la postura de Irán sobre armas de destrucción masiva. Esta reacción sigue a los comentarios del líder supremo, Alí Khamenei, quien reiteró que Irán hará “lo necesario” para defenderse. La fatua de 2003, que prohíbe las armas nucleares, podría modificarse bajo “una amenaza existencial”. Las tensiones aumentan tras el colapso del acuerdo nuclear de 2015 y los recientes avances de Irán en el enriquecimiento de uranio.
Irán insinuó este lunes que podría cambiar su doctrina nuclear -que dicta un uso exclusivamente civil de esta energía- “para defenderse”, en medio de una espiral de tensión por la escalada bélica de Israel en la región.
Así lo indicó el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Ismail Baghaei, en su rueda de prensa semanal cuando fue preguntado por los últimos comentarios de las autoridades sobre la cuestión nuclear, entre ellos el líder supremo, Alí Khamenei.
“Nuestra postura oficial sobre la prohibición de la fabricación de armas de destrucción masiva es clara, pero como dijo el líder en su discurso haremos lo necesario para defendernos”, afirmó Baghaei.
El diplomático además aseveró que Irán se “equiparará con todo lo que sea necesario para defender el país”.
Khamenei afirmó el sábado que hará “lo que sea necesario para preparar a la nación iraní en la confrontación con la arrogancia (de Estados Unidos e Israel), ya sea militar, armamentístico o políticamente”, en respuesta a un estudiante que le preguntó por un posible cambio de la doctrina nuclear del país.
La máxima autoridad política y religiosa iraní emitió una fatua (dictamen religioso) en 2003 que declaró “haram” (prohibido) las armas nucleares y biológicas, y desde entonces Irán ha asegurado que su programa nuclear tiene un fin exclusivamente civil.
En la misma línea, el asesor de Khamenei Kamal Kharrazi afirmó el viernes que Teherán podría cambiar su doctrina nuclear en caso de que tenga que hacer frente a “una amenaza existencial”, en una entrevista en el canal libanés de televisión Al Mayadeen.
Además, a principios de octubre 39 parlamentarios iraníes pidieron al Consejo Supremo de Seguridad Nacional que reconsiderara la doctrina de defensa de la República Islámica ante la amenaza israelí.
Los parlamentarios -de un total de 290- alegaron que la fatua que emitió Khamenei prohibiendo la fabricación y el uso de armas de destrucción masiva puede cambiar según las condiciones.
Estas discusiones acerca de la cuestión nuclear se producen en medio de choques directos con Israel, que mató a cinco iraníes en un ataque hace unos días contra Irán, que ha prometido venganza y que ya bombardeó el Estado judío a principios de mes con unos 180 misiles.
Estas palabras coinciden con un endurecimiento del tono de las autoridades iraníes contra Israel en los últimos días, en las que varios portavoces han asegurado que responderán con “fiereza” al ataque israelí del sábado contra objetivos militares que causó cinco muertos.
El programa atómico iraní ha avanzado mucho en los últimos años tras el colapso del acuerdo nuclear firmado en 2015, aunque el país no dispone de armas nucleares.
Según el más reciente informe del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), emitido en agosto en Viena, Irán produce uranio altamente enriquecido, hasta el 60 %, un material que apenas tiene usos civiles pero sí militares.
(Con información de EFE)