- Las fuerzas rusas capturaron múltiples asentamientos en Donetsk, avanzando hacia Kurakhove.
- Kiev sufrió un ataque masivo con drones; 66 de 96 fueron derribados, pero hubo daños por fragmentos.
Lo esencial: Rusia intensificó su ofensiva en el este de Ucrania, tomando control de varias localidades en la región de Donetsk. Informes indican avances rusos en Kurakhivka, Shakhtar y otros cinco asentamientos. Mientras tanto, Kiev enfrentó un ataque con 96 drones, de los cuales 66 fueron interceptados, pero los restos causaron daños a edificios residenciales. Volodimir Zelensky destacó que Rusia ha usado cientos de drones y bombas guiadas esta semana, y pidió sanciones más severas, señalando que la evasión de restricciones refuerza regímenes como Irán y Corea del Norte.
Por qué importa: la ofensiva rusa y los ataques aéreos intensifican la presión sobre Ucrania, aumentando la devastación civil:
- Kurakhove es un punto estratégico que, si capturado, podría abrir nuevas rutas para las fuerzas rusas.
Las fuerzas rusas intensificaron su ofensiva en el este de Ucrania este domingo, capturando varias localidades en la región de Donetsk mientras avanzan hacia el bastión estratégico de Kurakhove, en medio de una nueva oleada de ataques con drones contra Kiev y otras ciudades ucranianas.
Según informes de la plataforma analítica DeepState, que monitorea el conflicto, las tropas rusas tomaron control de Kurakhivka y Shakhtar en el centro de Donetsk, además de avanzar en cinco asentamientos adicionales: Maksimilianivka, Verbove, Novoselivka, Vovchenka y Maksimivka. El Ministerio de Defensa ruso también anunció la captura de la aldea de Vishnove, cerca de Selídove, una ciudad de 20,000 habitantes que cayó bajo control ruso la semana pasada.
Por su parte, el Estado Mayor del Ejército ucraniano reportó que sus fuerzas repelieron 51 ataques rusos en la zona cercana a Kurakhove solo el sábado, mientras que otros 23 ataques fueron rechazados en las proximidades de Pokrovsk. En total, se registraron 173 enfrentamientos a lo largo de la línea del frente, con las fuerzas rusas lanzando más de 3.000 ataques de artillería y 114 bombas aéreas guiadas.
No obstante, las pérdidas rusas continúan aumentando, según el ejército ucraniano, que reporta 1.410 bajas enemigas en el último día, además de la destrucción de 12 tanques y 36 vehículos blindados. Las pérdidas totales rusas se estiman en cerca de 700,000 efectivos desde el inicio del conflicto.
Mientras tanto, Kiev enfrentó otro ataque masivo con drones durante la noche. Las defensas aéreas ucranianas interceptaron 66 de los 96 drones lanzados por Rusia, incluyendo varios del tipo Shahed, así como un misil X-59/69. La alarma aérea en la capital se prolongó por 11 horas, y aunque todos los drones dirigidos a Kiev fueron derribados, los fragmentos causaron daños en edificios residenciales.
El presidente ucraniano Volodimir Zelensky reveló que Rusia ha lanzado cerca de 500 drones Shahed, más de 900 bombas aéreas guiadas y 30 misiles contra Ucrania solo esta semana. “La mayoría de estos ataques han sido dirigidos contra objetivos civiles e infraestructuras críticas”, afirmó Zelensky.
Las autoridades ucranianas reportan que las fuerzas rusas están adaptando constantemente sus tácticas, operando los drones a muy baja altitud para evadir los sistemas de defensa aérea. Zelensky enfatizó que estos ataques podrían haberse prevenido con mayor apoyo internacional y señaló que los más de 2.000 drones Shahed que atacaron Ucrania en octubre contenían más de 170.000 componentes electrónicos procedentes de empresas chinas, europeas y estadounidenses.
La escalada de violencia coincide con los llamados de Zelensky para fortalecer las sanciones contra Rusia y prevenir la evasión de las restricciones existentes. “Las sanciones deben aumentar y ser efectivas. Todo plan para eludirlas es un crimen contra las personas y el mundo”, declaró el mandatario ucraniano, advirtiendo que la capacidad de Rusia para evadir sanciones también fortalece a regímenes como los de Irán y Corea del Norte.
(Con información de EFE)