En cada rincón del planeta, la humanidad ha compartido durante siglos historias de apariciones, rituales y criaturas sobrenaturales. Estas leyendas, algunas macabras y otras escalofriantes, han cruzado generaciones y fronteras, manteniéndose vivas a través de la tradición oral y el misterio que las envuelve. Hoy, cuando Halloween y las festividades en honor a los difuntos invitan a explorar los miedos humanos, estos relatos parecen cobrar aún más fuerza.
Aquí, un recorrido por algunas de las historias de terror más emblemáticas de diversos países:
Venezuela: La Sayona
La Sayona es una de las leyendas de terror más famosas y arraigadas de Venezuela, especialmente en las zonas rurales y llaneras. Este relato cuenta la historia de una mujer espectral que vaga en las noches, acechando principalmente a hombres infieles y borrachos que se aventuran lejos de sus hogares.
Su aparición suele ser descrita como una figura femenina de gran belleza, que primero atrae a sus víctimas y luego se transforma en una visión aterradora, revelando su verdadero y macabro aspecto. A menudo se la presenta con largos cabellos negros, vestida de blanco, y con una expresión de ira y dolor que hiela la sangre de quienes la encuentran.
Argentina: la Luz Mala
Es una de las leyendas rurales más extendidas en Argentina, especialmente en las regiones de la pampa y el litoral. La historia cuenta que esta luz misteriosa aparece en los campos durante la noche y, aunque en ocasiones parece inofensiva, trae consigo un mensaje de advertencia o peligro. Según la tradición, se trata de una aparición sobrenatural, una especie de fuego fatuo que flota cerca del suelo, con un brillo azul o verdoso, y que suele verse en lugares deshabitados o cercanos a cementerios y rutas solitarias.
China: los cadáveres andantes
En las antiguas rutas de China, existía una procesión que podía hacer temblar a quienes la encontraban en plena noche. Era liderada por un hombre que sostenía una linterna blanca y dispersaba papel moneda mientras entonaba una extraña melodía. Tras él caminaba una figura encapuchada y erguida, y, detrás, otra persona guiaba a la siniestra comitiva. Esta figura central, alta y rígida, no era otra que un cadáver.
Conocidos como “cadáveres andantes”, estos encargados cumplían un papel importante: devolver al fallecido a su lugar de origen. En la tradición china, si alguien moría lejos de casa, debía ser enterrado en su tierra natal para evitar que su espíritu se convirtiera en un “fantasma hambriento”. Las familias, entonces, contrataban a especialistas en el arte de transportar a los muertos, en un trayecto que combinaba ritual y misticismo.
En su investigación de esta leyenda, el escritor Liao Yiwu documentó testimonios de aquellos que decían haber visto este ritual, e incluso oyeron que algunos “caminantes” utilizaban un gato negro para generar electricidad estática y hacer “caminar” el cuerpo. Aunque hoy ya no existen registros de estas procesiones, la historia de los caminantes de cadáveres perdura, recordando una de las tradiciones funerarias más enigmáticas de China.
Francia: la leyenda de San Dionisio
La leyenda de San Dionisio, patrón de París, es una de las más antiguas y aterradoras de Francia. Se dice que en el siglo III, tras ser decapitado por las autoridades romanas en lo que hoy es Montmartre, el cuerpo de San Dionisio recogió su cabeza y caminó unos seis kilómetros hasta el pueblo de Saint-Denis, donde finalmente cayó al suelo.
San Dionisio, considerado el primer obispo de París, sufrió torturas por su fe y se convirtió en un símbolo de devoción. Hoy en día, su imagen decapitado y sosteniendo su cabeza aparece en esculturas y representaciones, incluyendo una estatua en Montmartre. En la actual ciudad de Saint-Denis, donde se encuentra la famosa basílica que lleva su nombre, esta leyenda continúa siendo una parte central de la historia y la religiosidad de la región.
Mongolia: el gusano de la muerte
Bajo las vastas arenas del desierto de Gobi se esconde, según la leyenda, un temido ser conocido como el Gusano de la Muerte de Mongolia. Esta criatura, de unos 60 centímetros de largo y sin extremidades, tiene la capacidad, según se dice, de liberar un veneno letal e incluso de matar a distancia a través de una descarga eléctrica.
El mito del gusano se popularizó en 1926 cuando el explorador estadounidense Roy Chapman Andrews relató la historia en su libro tras una expedición a Mongolia. Aunque ni él ni su equipo lograron verlo, la descripción de la criatura como un gusano en forma de intestino y de color rojo oscuro llamó la atención de exploradores y científicos. A pesar de los intentos por encontrar alguna prueba de su existencia, el Gusano de la Muerte permanece como un enigma en el folclore mongol.
Brasil: Bárbara dos Prazeres
En el Río de Janeiro colonial, a finales del siglo XVIII, una mujer llamada Bárbara dos Prazeres ganó notoriedad por su belleza y por los oscuros rumores que la rodeaban. Se dedicó al trabajo sexual en el Arco de Teles, donde se relacionó con figuras de la alta sociedad de la época. Sin embargo, con el paso de los años y el deterioro de su salud, Bárbara comenzó a realizar prácticas siniestras en busca de juventud.
El relato, cargado de elementos macabros, afirma que Bárbara se volvió tan desesperada que comenzó a usar sangre de bebés abandonados en una institución de la época. A pesar de que no hay registros oficiales que confirmen su existencia, la leyenda asegura que su espíritu todavía vaga por las oscuras calles del Arco de Teles, donde se dice que continúa buscando sangre para saciar su inquietante sed de juventud.
Nigeria: Madam Koi Koi
En las escuelas internado de Nigeria, pocas historias han sido tan perturbadoras para los estudiantes como la de Madam Koi Koi. Esta leyenda urbana narra la historia de una mujer que camina por los pasillos en las noches, con el eco de sus zapatos rojos resonando, un inquietante “koi koi” que da nombre a su historia.
La leyenda de Madam Koi Koi carece de un origen definido, pero se cree que era una profesora que falleció poco después de ser despedida y que, desde entonces, regresa en busca de venganza. Estudiantes de distintas escuelas afirman haber oído sus pasos y, en algunos casos, los dormitorios han sido cerrados para evitar cualquier encuentro con el espectro.
Reino Unido: el Talbot Hotel y el fantasma de María, reina de Escocia
En Oundle, un antiguo poblado del Reino Unido, se encuentra The Talbot Hotel, un lugar que guarda entre sus muros una escalera legendaria. Esta misma escalera, según se dice, fue descendida por María, reina de Escocia, camino a su ejecución en 1587. Décadas después, la estructura fue trasladada al hotel desde el castillo de Fotheringhay, donde María fue decapitada.
Los visitantes y trabajadores del hotel han reportado avistamientos de una figura espectral vestida de blanco o negro en las escaleras. Algunos aseguran haber escuchado sollozos en la madrugada, atribuyendo estos sonidos al alma de la reina escocesa. The Talbot Hotel, conocido por su atmósfera histórica, se ha convertido en un destino popular para quienes buscan vivir experiencias paranormales en un entorno cargado de historia.
Indonesia: apariciones en el sitio del accidente de tren de Bintaro
En Indonesia, el accidente de tren de Bintaro en 1987 dejó una cicatriz profunda en la memoria del país, cobrando la vida de 139 personas en un choque frontal entre dos trenes. Desde entonces, historias sobre apariciones espectrales en la zona han surgido, describiendo figuras con ropas ensangrentadas deambulando cerca de las vías.
La tragedia dejó una huella imborrable en la zona, y los residentes creen que los espíritus de aquellos que murieron en el accidente aún rondan el lugar. En 2013, otro accidente en el mismo sitio reforzó las leyendas de que las vías de Bintaro están malditas. La historia de estas apariciones ha cobrado tal relevancia que muchas personas consideran que la tragedia aún no ha liberado a las almas atrapadas en aquel siniestro.
Japón: Yotsuya Kaidan, la venganza de Oiwa
Una de las historias de fantasmas más conocidas de Japón es Yotsuya Kaidan, un relato sobre la traición y el poder del rencor eterno. Oiwa, la protagonista, es una mujer que tras ser envenenada y desfigurada por la amante de su esposo, muere y regresa como un espectro para perseguirlo. La imagen de Oiwa como un espíritu vengativo ha sido representada en el teatro Kabuki y en varias películas, consolidando su lugar en la cultura japonesa.
El mito de Oiwa sigue siendo poderoso, explorando temas como el amor y la traición. Su historia ha perdurado no solo como una advertencia, sino como una reflexión sobre los sentimientos humanos y las consecuencias de la injusticia.
Kenia: el ogro de las colinas de Ngong
En la tradición Maasai de Kenia, existe una historia sobre un ogro que solía atacar aldeas para robar ganado, la fuente de riqueza y sustento de la comunidad. Sin embargo, este monstruo encontró su fin cuando se enamoró de una mujer Maasai llamada Sanayian, quien reveló su verdadera identidad a los guerreros de su pueblo. Aprovechando este momento de vulnerabilidad, los guerreros emboscaron y mataron al ogro.
La leyenda sostiene que los cinco picos de las colinas de Ngong, ubicadas en las afueras de Nairobi, representan los dedos del ogro caído. Hoy en día, estas colinas son un popular destino de senderismo, pero para los Maasai, el lugar sigue teniendo un significado profundo que conecta a las generaciones actuales con sus raíces ancestrales.
Filipinas: la dama de blanco de Balete Drive
En la ciudad de Manila, Filipinas, Balete Drive es una calle envuelta en misterio, donde según la leyenda, se aparece una “dama de blanco” que causa escalofríos a quienes transitan por allí de noche. Los relatos de esta figura femenina, de largos cabellos y un vestido blanco, han sido contados y recontados desde la década de 1950.
Se dice que esta figura aparece especialmente ante los taxistas que recorren la calle en altas horas de la noche, pidiendo un viaje para luego desaparecer misteriosamente del asiento trasero. Aunque su origen es incierto, la leyenda ha inspirado películas y es motivo de precaución para quienes circulan por Balete Drive durante la madrugada.
Hungría: La novia de mármol en Budapest
En una de las avenidas arboladas de Budapest, Hungría, una figura inusual observa desde un balcón de piedra: la estatua de una mujer con una expresión melancólica, conocida como la “novia de mármol”. Según la leyenda, la figura representa a una joven que esperó en vano a su amado, quien nunca regresó de la guerra.
Una versión de la historia dice que el esposo, tras regresar y hallar a su esposa muerta, mandó esculpir la estatua en su honor. Otra versión asegura que la joven se convirtió en piedra esperando eternamente a su amor. Este enigmático monumento sigue capturando la atención de los transeúntes, quienes no pueden evitar sentir la tristeza que emana de esta escultura.
(Con información de The Associated Press)