Qatar, Sudáfrica y el Vaticano se han ofrecido como mediadores para negociar con Rusia la entrega de decenas de miles de niños ucranianos que han sido trasladados a territorio ruso desde la invasión de Ucrania.
El acuerdo fue anunciado este jueves en la conclusión de la Conferencia sobre la Dimensión Humana del Plan de Paz de Ucrania que se ha llevado a cabo durante los dos últimos días en Montreal (Canadá) con la presencia de los representantes de más de 70 países.
La ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, también señaló que Lituania y Qatar se han ofrecido para ser países de tránsito de los ucranianos capturados por Rusia antes de su regreso a Ucrania y que los Emiratos Árabes Unidos (EAU) seguirán mediando para la liberación de prisioneros de guerra.
“Estamos anunciando el Compromiso de Montreal para el regreso de ucranianos. Hemos sido capaces de conseguir el apoyo de más países para que más personas regresen a sus hogares. Cada niño que vuelve es una victoria en sí mismo”, declaró Joly durante la rueda de prensa final de la conferencia.
Joly afirmó que está convencida de que se podrán encontrar soluciones para el regreso de 25.000 niños ucranianos que se estima están en poder de Moscú así como de los prisioneros de guerra y civiles capturados por las fuerzas rusas.
El ministro de Asuntos Exteriores de Noruega, Espen Barth Eide, que junto con Joly organizó la conferencia, declaró que la reunión permitirá “desarrollar instrumentos para recoger información, compartir datos, identificar personas sobre dónde están, cuáles son sus condiciones y encontrar formas para que mejore el acceso de la Cruz Roja Internacional”.
El representante noruego también criticó a Moscú al señalar que de acuerdo a las leyes internacionales “Rusia es claramente el agresor al violar la Carta de la ONU y Ucrania es la víctima”.
Eide añadió que “Rusia no puede evadir sus obligaciones bajo las leyes internacionales de derechos humanos o de la Carta de la ONU”.
Destrucción de la identidad ucraniana
Una coalición de 61 organizaciones no gubernamentales ucranianas e internacionales ha publicado recientemente una carta denunciando que, además de la deportación forzosa de miles de menores ucranianos, Rusia controla actualmente a 1,5 millones de niños en las áreas ocupadas de Ucrania.
Estas organizaciones advierten que Moscú busca erradicar la identidad ucraniana de estos niños, a quienes obliga a adaptarse a un entorno y una cultura ajenos para ellos.
“Rusia pretende erradicar su identidad ucraniana y transformarles en enemigos de su propia nación”, señala la coalición.
El tema de los menores desplazados se ha convertido en uno de los puntos centrales del plan de paz que Canadá y Noruega buscan implementar, junto con el retorno seguro de los civiles detenidos y la reintegración de aquellos obligados a abandonar Ucrania.
Paralelamente a la conferencia en Montreal, un bombardeo ruso en la ciudad de Kharkiv dejó un saldo trágico. Un niño de 11 años murió tras sufrir heridas graves en la cabeza, según informó el gobernador, Oleg Sinegubov.
El ataque, realizado con una poderosa bomba aérea guiada, destruyó varios pisos del edificio alcanzado, generando una gran destrucción y poniendo en peligro la labor de los rescatistas que aún intentan encontrar a posibles víctimas bajo los escombros.
“La destrucción causada por la bomba aérea guiada del enemigo es bastante significativa”, aseguró Sinegubov, quien advirtió que podrían encontrarse más personas atrapadas.
(Con información de EFE)