La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, adelantó este martes que su Gobierno intensificará la presión sobre Rusia con un nuevo paquete de sanciones que podría anunciarse la semana próxima y que se dirigirá contra los países y las empresas que facilitan el suministro de material militar a Moscú.
“Continuamos actuando contra la evasión de sanciones rusas, y tan pronto como la semana que viene, presentaremos nuevas y contundentes sanciones dirigidas a aquellos que facilitan la maquinaria de guerra del Kremlin, incluyendo intermediarios en terceros países que están suministrando a Rusia materiales críticos para su ejército”, declaró Yellen.
Sus comentarios coinciden con la reunión esta semana en Washington de líderes financieros de todo el mundo para las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
Estas nuevas restricciones se enmarcan en nuevas medidas que ha tomado Washington en los últimos meses para impedir que las Fuerzas Armadas rusas accedan a tecnología y armamento para la guerra en Ucrania, que comenzó en febrero de 2022.
Tras la invasión, Estados Unidos se coordinó con la Unión Europea (UE) y países aliados como Canadá para imponer sanciones destinadas a aislar la economía rusa del mercado financiero internacional, como la exclusión de bancos rusos del sistema de comunicación interbancario internacional SWIFT y sanciones contra su sector energético.
En los últimos meses, Washington y sus aliados han intensificado sus sanciones sobre lo que denominan la “maquinaria bélica” de Rusia con restricciones, por ejemplo, a la exportación de productos que pueden usarse para fines civiles y militares.
Para esquivar las sanciones occidentales, Rusia ha encontrado nuevas rutas para hacerse con ese material a través de países como China, India, Malasia o Tailandia.
Según Washington, el Kremlin ha recurrido a países como Corea del Norte e Irán para comprar armamento, incluidas municiones y drones. El régimen de Pyongyang también proporcionará efectivos, con las primeras tropas ya enviadas a Rusia.
Sin embargo, la efectividad de las sanciones se está haciendo notar, según David O’Sullivan, enviado especial internacional de la UE para la implementación de las sanciones europeas, quien la semana pasada señaló que están teniendo “un impacto muy claro sobre su capacidad de mantener la guerra”. Aunque algunos indicadores económicos rusos parecen positivos, O’Sullivan destacó que el país enfrenta tipos de interés al 20% y una inflación del 10 por ciento.
Por su parte, el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, anunció hoy que Rusia deberá pagar por los daños causados en Ucrania mediante un nuevo mecanismo que usará los rendimientos extraordinarios de los activos rusos inmovilizados. La Eurocámara espera aprobar un mecanismo de préstamos a Ucrania de hasta 50.000 millones de dólares, del cual la UE aportará 35.000 millones de euros.
Por eso, en la reunión del llamado grupo BRICS que comenzó este martes en Rusia, el presidente ruso Vladimir Putin busca impulsar un sistema de pagos conocido como Puente BRICS, que ayudaría al país a eludir los problemas que ha tenido para enviar y recibir dinero en el comercio mundial debido a las sanciones.