Medios libaneses reportaron este domingo los primeros ataques con drones contra una sucursal financiera de Al Qard Al Hassan, perteneciente al grupo terrorista Hezbollah, en un suburbio del sur de Beirut, con el objetivo de debilitar su sistema económico, de acuerdo a lo anunciado previamente por Israel.
De acuerdo al diario libanés L’Oriente Le Jour, después de las 20 GMT, el Ejército israelí logró impactar “el objetivo de la agencia de Al Qard Al Hassan, ubicada en el primer piso de un edificio en Ali el-Nahri, en Becá”.
Sin embargo, agrega el medio, el edificio no se derrumbó, pero resultó afectado, al igual que los edificios circundantes.
“Residentes del Líbano, nuestras tropas próximamente atacarán infraestructura perteneciente a Al Qard Al Hassan, manténganse alejados de ella de inmediato”, había escrito en un mensaje en su cuenta de X el portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee.
Estas alertas de evacuación afectan a los residentes de la capital libanesa y otras áreas del país donde haya “sitios que utiliza Hezbollah para financiar su actividad terrorista”, alertó el portavoz del Ejército de Israel, Daniel Hagari en una conferencia de prensa.
“Vamos a atacar el poder económico de Hezbollah”, aseveró Hagari, y agregó que “el objetivo es dañar la confianza de los agentes en la organización”.
“Hezbollah tiene diferentes vías de financiación, pero las más importantes son a través de las compañías que ha creado como Al Qard al Hassan. Sabemos que con esta especie de banco, desconectado del sistema internacional SWIFT, paga salarios dentro de su organización y es usado por muchos civiles libaneses”, explicó un alto funcionario de la inteligencia israelí.
Este mismo alto funcionario de la inteligencia israelí aseguró que todos los meses el régimen de Irán transfiere dinero a la formación libanesa y que también tienen constancia de que diplomáticos afines a la milicia entran en el país con dinero en sus maletas.
Por su parte, en medio de una nueva jornada de ataques cruzados, Hezbollah reivindicó este domingo un total de 25 ataques de diferente tipo contra “grupos de soldados” y posiciones israelíes al otro lado de la frontera entre Líbano e Israel, así como contra ciudades y asentamientos en el norte del territorio israelí.
En una serie de comunicados, el grupo terrorista aseguró que atacó con “andanadas de misiles” la ciudad de Haifa y una base militar al este de la localidad de Safad, ambas en el norte de Israel, así como varios asentamientos al otro lado de la divisoria.
Afirmó también que sus combatientes lanzaron ataques similares contra “grupos de soldados” israelíes en posiciones militares en áreas como Wadi Honen, Markba y Bleida y “repelieron a un dron israelí tipo Hormuz900 , al que obligaron a abandonar el espacio aéreo libanés”.
Hezbollah reiteró que sus ataques van “en apoyo al pueblo palestino en Gaza y su resistencia y en defensa del Líbano”.
El Ejército israelí reportó el domingo por la noche que durante la jornada se registraron cerca de 200 proyectiles lanzados desde Líbano.
Por su parte, la aviación israelí continuó sus ataques contra localidades del sur y el este del Líbano, donde las autoridades sanitarias libaneses informaron de la muerte de varias personas y la destrucción de edificios, principalmente en las localidades meridionales del país mediterráneo.
Pese a la escalada de tensiones, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, sacó pecho este domingo de los resultado logrados hasta ahora por las tropas en la incursión terrestre en el sur de Líbano que, asegura, está permitiendo “destruir” a Hezbollah y sus capacidades militares.
“No solo estamos destruyendo al enemigo, sino que además estamos desmantelando sus túneles, depósitos de armas y su infraestructura de ataque. El resultado es claro: en los lugares que Hezbollah preparó para usar como plataformas para atacarnos ahora hay tropas realizando operaciones”, dijo Gallant a la División 98 del Ejército tras visitar hoy la frontera de Israel con Líbano.
Por otra parte, el titular de Defensa indicó que los miembros del grupo libanés capturados por las fuerzas israelíes están compartiendo más información con ellos y que se muestran “aterrorizados” ante la posibilidad de que su milicia pueda “estar colapsando”.
(Con información de EFE)