La Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) solicitó una investigación “exhaustiva y transparente” sobre la presunta muerte de decenas de migrantes afganos que habrían recibido disparos en una zona fronteriza con Irán.
A través de su perfil oficial en la red social X, la Misión manifestó su “profunda preocupación por los inquietantes informes” que señalan qué un “numeroso grupo de migrantes” habrían muerto o resultado heridos después de haber sido tiroteados.
“La UNAMA pide que se lleve a cabo una investigación exhaustiva y transparente del presunto incidente y recuerda a todas las partes que los derechos de los migrantes, refugiados y solicitantes de asilo están protegidos por el derecho internacional”, agregó.
El portavoz adjunto del régimen talibán, Hamdullá Fitrat, anunció en sus redes sociales que las autoridades afganas enviaron “una delegación de alto rango” con el objetivo de realizar una “investigación detallada” sobre los hechos.
Fitrat añadió que la delegación “ha trabajado ininterrumpidamente ayer, anoche y hoy, y está tratando de descubrir la verdad del asunto lo antes posible y aclararlo a los ciudadanos”.
El miércoles, Irán comenzó a desmentir los informes sobre el incidente. El general Reza Shojaei, comandante de la guardia fronteriza provincial, calificó “básicamente falsas” las informaciones sobre el tiroteo. Por su parte, Hassan Kazemi Ghomi, representante especial del presidente iraní para los asuntos de Afganistán, también rechazó las acusaciones en X, culpando de la difusión de la historia a “la histeria de los medios mentirosos”.
Además, el embajador iraní en Afganistán, Hassan Kazemi Qomi, informó ayer que, tras el “seguimiento directo” de la situación desde las primeras informaciones, las autoridades iraníes concluyeron que “la noticia sobre la muerte de decenas de ciudadanos ilegales en la frontera de Saravan no es cierta”.
El representante iraní en Kabul subrayó que Irán se reserva el derecho de impedir la entrada de migrantes irregulares, pero destacó que Teherán actúa “de forma totalmente legal, responsable y basada en una política de larga data de buena vecindad, compasión islámica y compromiso con las disposiciones de los tratados internacionales”.
Las primeras noticias sobre este presunto incidente aparecieron en un portal iraní especializado en la situación humanitaria de la provincia de Sistán y Baluchistán, que limita con Afganistán, país gobernado por el régimen talibán.
HalVash, la organización que defiende los derechos humanos en Irán, publicó una serie de informes sobre el tiroteo, citando a dos testigos no identificados y otras fuentes que afirman que hay 260 muertos, con varios heridos.
El grupo compartió imágenes de lo que parecían ser varios cadáveres y otras personas con heridas de bala. El portal también acusó a las fuerzas de seguridad iraníes de haber utilizado tanto armas de fuego como granadas propulsadas por cohetes durante el ataque.
La retórica anti-migrante afgana ha escalado en Irán en los últimos meses, a medida que las sanciones occidentales han afectado su economía. El jefe de la policía del país declaró que aproximadamente 2 millones de migrantes serían deportados en los próximos seis meses.
(Con información de Europa Press / AP)