Canadá y la India expulsaron el lunes a seis diplomáticos cada uno en el marco de una escalada de tensión por el asesinato en junio de 2023 de un activista sij en Canadá.
Un alto funcionario del gobierno canadiense declaró que Canadá expulsaba a seis diplomáticos indios, incluido el Alto Comisionado, después de que la policía descubriera pruebas de actividades delictivas violentas en curso vinculadas al gobierno indio.
Poco después, el Ministerio de Asuntos Exteriores indio comunicó que expulsaba a seis diplomáticos canadienses, entre ellos el Alto Comisionado en funciones y el Alto Comisionado adjunto. Los diplomáticos debían abandonar el país a más tardar el sábado.
El ministerio había dicho anteriormente el lunes que India estaba retirando a sus diplomáticos, después de rechazar la comunicación diplomática de Canadá el domingo que decía que el embajador indio era una “persona de interés” en el asesinato.
Un segundo alto funcionario canadiense dijo que Canadá expulsó primero a los diplomáticos indios antes de retirarse. Ambos funcionarios hablaron con la agencia de noticias AP bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar públicamente sobre el asunto.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo el año pasado que existían acusaciones creíbles de que el gobierno indio tenía vínculos con el asesinato en Canadá, en junio de 2023, del activista sij Hardeep Singh Nijjar. India ha rechazado la acusación por considerarla absurda.
Nijjar, de 45 años, recibió un disparo mortal en su camioneta en junio de 2023 tras salir del templo sij que dirigía en la ciudad de Surrey, Columbia Británica. Ciudadano canadiense de origen indio, era propietario de un negocio de fontanería y líder de lo que queda de un movimiento antaño fuerte para crear una patria sij independiente.
India lo calificó de terrorista en 2020 y, en el momento de su muerte, había solicitado su detención por su presunta implicación en un atentado contra un sacerdote hindú.
En respuesta a las acusaciones, India comunicó a Canadá el año pasado que retirara a 41 de sus 62 diplomáticos en el país. Desde entonces, las relaciones entre ambos países se han enfriado.
El movimiento pro Jalistán, o independencia sij, es un asunto espinoso entre India y Canadá. Nueva Delhi ha criticado repetidamente al gobierno de Trudeau por ser blando con los partidarios del movimiento Jalistán que residen en Canadá. El movimiento Jalistán está prohibido en India, pero cuenta con apoyo entre la diáspora sij, especialmente en Canadá.
India ha pedido a países como Canadá, Australia y el Reino Unido que emprendan acciones legales contra activistas sijs. India ha planteado estas preocupaciones especialmente a Canadá, donde los sijs representan casi el 2% de la población del país.
El Ministerio de Asuntos Exteriores indio declaró el lunes que “India se reserva el derecho a tomar nuevas medidas en respuesta al apoyo del gobierno de Trudeau al extremismo, la violencia y el separatismo contra India”.
El ministerio también convocó al máximo diplomático canadiense en Nueva Delhi y le dijo que "el ataque sin fundamento" contra el alto comisionado indio, o embajador, y otros diplomáticos y funcionarios en Canadá "era completamente inaceptable."
“No tenemos fe en el compromiso del actual gobierno canadiense para garantizar su seguridad”, afirmó.
Stewart Wheeler, el diplomático canadiense al que se ordenó abandonar India, declaró a la prensa tras ser convocado que su gobierno ha compartido "pruebas increíbles e irrefutables de los vínculos entre agentes del gobierno de India y el asesinato de un ciudadano canadiense en suelo canadiense".
Wheeler dijo que India debe investigar las acusaciones y que Canadá "está dispuesta a cooperar con India".
(Con información de AP)