Israel afirmó que un tanque bajo fuego enemigo chocó con un puesto de la misión de la ONU en Líbano

El Ejército indicó que el vehículo de combate “trataba de evacuar a soldados heridos” cuando retrocedió varios metros “y colisionó con un puesto de la Finul”

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Miembros de las fuerzas de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas (FINUL) observan la frontera entre el Líbano e Israel desde el tejado de una torre de vigilancia en la ciudad de Marwahin. (REUTERS/Thaier Al-Sudani/archivo)
Miembros de las fuerzas de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas (FINUL) observan la frontera entre el Líbano e Israel desde el tejado de una torre de vigilancia en la ciudad de Marwahin. (REUTERS/Thaier Al-Sudani/archivo)

El ejército israelí afirmó este domingo que uno de sus tanques chocó con un puesto de la ONU en Líbano cuando estaba bajo fuego en el sur de Líbano, donde lucha contra el grupo terrorista Hezbollah.

“Un tanque que trataba de evacuar a soldados heridos bajo fuego retrocedió varios metros y colisionó con un puesto de la Finul”, que anunció anteriormente que dos tanques israelíes habían irrumpido en una de sus posiciones, indicó un comunicado castrense.

El incidente, que ocurrió alrededor de las 4:30 am hora local en la zona de Ramia, involucró a dos tanques Merkava de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que “destruyeron la puerta principal de la posición y entraron por la fuerza”, de acuerdo con un comunicado de la FINUL. Los tanques permanecieron en la base durante aproximadamente 45 minutos antes de retirarse tras las protestas de las fuerzas de paz.

Este evento marca una escalada significativa en las ya tensas relaciones entre Israel y la FINUL, que se han visto agravadas en los últimos días por una serie de incidentes que han resultado en heridas a varios cascos azules.

Israel aseguró que su tanque golpeó un puesto de la ONU en Líbano tras quedar bajo fuego enemigo (REUTERS/Amir Cohen)
Israel aseguró que su tanque golpeó un puesto de la ONU en Líbano tras quedar bajo fuego enemigo (REUTERS/Amir Cohen)

La misión de la ONU también reportó que, poco después de la incursión de los tanques, se registraron disparos cerca de la base que emitían humo, afectando a 15 miembros de las fuerzas de paz que sufrieron irritación cutánea y reacciones gastrointestinales. “Hemos pedido explicaciones a las FDI por estas escandalosas violaciones”, declaró la FINUL en su comunicado.

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, hizo un llamado al Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, para que retire a las fuerzas de la FINUL de la zona, argumentando que Hezbollah las está utilizando como “escudos humanos”. “Señor Secretario General, saque a las fuerzas de la FINUL del peligro. Debe hacerlo ahora mismo, inmediatamente”, dijo Netanyahu en un video difundido por su oficina.

Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel. (Abir Sultan/Reuters)
Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel. (Abir Sultan/Reuters)

Sin embargo, la FINUL ha reiterado su negativa a abandonar sus posiciones en el sur del Líbano. Andrea Tenenti, portavoz de la misión, declaró a la AFP: “Hubo una decisión unánime de permanecer porque es importante que la bandera de la ONU siga ondeando alta en esta región, y poder informar al Consejo de Seguridad”.

La situación ha provocado una reacción internacional, con 40 países contribuyentes a la FINUL condenando enérgicamente los recientes ataques contra las fuerzas de mantenimiento de la paz. Estados Unidos, a través del Secretario de Defensa Lloyd Austin, ha pedido a Israel que garantice la seguridad de los cascos azules y de las Fuerzas Armadas libanesas.

El conflicto se desarrolla en un contexto de creciente tensión regional, con la amenaza de una posible represalia israelí contra Irán por el ataque con misiles del 1 de octubre. Según fuentes estadounidenses, Israel podría estar planeando atacar infraestructura militar y energética iraní, aunque se descarta por ahora un ataque a instalaciones nucleares.

La FINUL, establecida en 1978 tras la invasión israelí del Líbano, cuenta actualmente con unos 9.500 soldados de diversas nacionalidades y tiene como misión supervisar el alto el fuego que puso fin a la guerra de 33 días entre Israel y Hezbollah en 2006.

Vehículos de las fuerzas de paz de la ONU (UNIFIL) aparcados en Marjayoun, cerca de la frontera con Israel (REUTERS/Karamallah Daher)
Vehículos de las fuerzas de paz de la ONU (UNIFIL) aparcados en Marjayoun, cerca de la frontera con Israel (REUTERS/Karamallah Daher)

El primer ministro libanés, Najib Mikati, condenó el llamado de Netanyahu a la retirada de la FINUL, calificándolo como “un nuevo capítulo en el planteamiento del enemigo de no cumplir las normas internacionales”.

Mientras tanto, la comunidad internacional observa con preocupación el desarrollo de los acontecimientos, temiendo que cualquier escalada adicional pueda desencadenar un conflicto regional de mayores proporciones. La situación en la frontera entre Israel y Líbano sigue siendo extremadamente volátil, con la FINUL atrapada en medio de las tensiones entre Israel y Hezbollah.

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