Las autoridades rusas cesaron a ocho generales de los ministerios de Interior y Emergencias, el Comité de Investigaciones de Rusia (CIR) y el Servicio Federal Penitenciario, según informó hoy la agencia estatal rusa RIA Nóvosti, sin precisar los motivos de esos cambios.
La agencia, que cita “una fuente informada de la situación”, puntualizó que entre los cesados están el jefe de la dirección del CIR de la región de Stávropol, mayor general Ígor Ivanov, y su homólogo de la región de Buriatia, general mayor Viacheslav Sujorúkov.
Además, cesaron los jefes de los departamentos regionales del Ministerio de Emergencias en la región de Moscú y Rostov, los tenientes generales Serguéi Poletikin y Serguéi Filipov, y el subdirector del departamento de Control Operativo de Emergencias, mayor general Alexandr Molchánov.
Este mismo lunes el canal independiente ruso VChK-OGPU había incluido en esta lista al jefe de Emergencias en Vorohezh, Kiril Levita, al segundo al mando en la dirección regional del Ministerio de Interior en Sarátov, Rostislav Lésnikov.
Incluyó además a un funcionario del Sistema de Penitenciaría ruso, Alexéi Tímchenko, anteriormente detenido por haber aceptado un soborno.
VChK-OGPU publicó una imagen de un presunto decreto secreto del presidente ruso, Vladímir Putin, donde ordenaba la destitución de estos generales y la designación de nuevos responsables.
Los servicios de prensa de las direcciones regionales de Emergencias de Rostov y la región de Moscú confirmaron al periódico ruso que Filípov y Poletikin fueron liberados de los cargos, y especificaron que el segundo fue cesado “por alcanzar la edad máxima” para ocupar el cargo.
Este cese de los ocho generales tiene lugar tras varios meses de detenciones por causas de corrupción de altos cargos del Ministerio de Defensa de Rusia, que arrancaron en abril pasado con el arresto del viceministro Timur Ivanov, mano derecha del anterior ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú.
“Guerra terrorista”
El jefe del Servicio de Espionaje Exterior (SVR) ruso, Serguéi Narishkin, denunció este lunes que “Ucrania y sus patrones occidentales han desatado una auténtica guerra terrorista contra Rusia” ante la imposibilidad obtener logros estratégicos en el campo de batalla, declaró Narishkin.
“El régimen de Zelenski organiza ataques terroristas en territorio ruso con la esperanza de desmoralizar y desestabilizar a la sociedad”.
”Para lograr sus objetivos geopolíticos, los anglosajones consideran justificado utilizar cualquier medio, sin excluir el terrorismo”, recalcó Narishkin, que añadió que Estados Unidos y Gran Bretaña se convierten en países patrocinadores de terrorismo.
”Se cuenta con datos que indican que las agencias de inteligencia occidentales, principalmente el británico MI6, entrenaron sistemáticamente a grupos de sabotaje ucranianos para organizar provocaciones en varias plantas de nucleares en Rusia”, denunció.
El jefe del SVR añadió que el “ataque terrorista” lanzado a fines de agosto pasado por las Fuerzas Armadas de Ucrania contra la región rusa de Kursk incluía la captura de su central nuclear y la colocación de explosivos en sus instalaciones. ”Si ese plan se hubiera llevado a cabo, Europa se habría enfrentado a un desastre ambiental y humanitario comparable al de Chernóbil”, subrayó.
Según Narishkin, los servicios de inteligencia de EEUU desde el mismo comienzo del conflicto proporcionan información a Kiev que luego se utiliza para atacar infraestructuras civiles rusas. ”Los estadounidenses prestaron especial atención al seguimiento de la situación en las regiones de Kursk y Bélgorod, que posteriormente se convirtieron en objetivos de ataques con misiles, drones, así como de grupos de sabotaje de Ucrania”, dijo el responsable del espionaje ruso.
(Con información de EFE)