El presidente de Túnez, Kais Saied, acusado por la sociedad civil de una “deriva autoritaria”, fue reelecto con el 90,7% de los votos, informó el lunes la autoridad electoral del país magrebí, que cuenta con una población de 12 millones de habitantes.
La participación en las elecciones del domingo alcanzó el 28,8%, marcando el nivel más bajo desde que se instauró la democracia en 2011.
De los 17 candidatos iniciales, solo dos recibieron autorización para competir contra Kais Saied. Los otros 15 fueron descalificados por la autoridad electoral ISIE debido a supuestas irregularidades.
El presidente de la ISIE, Faruk Buaskar, explicó en una rueda de prensa que Ayachi Zammel, líder del partido liberal Azimun, obtuvo el 7,35% de los votos, mientras que Zuhair Maghzaui, líder del progresista Movimiento del Pueblo (Echaab), alcanzó el 1,97% de los apoyos.
La televisión pública tunecina difundió encuestas a pie de urna realizadas por Sigma Conseil, una empresa independiente cuyas cifras generalmente coinciden con los resultados oficiales. Según los sondeos del domingo, Kais Saied lideraba con más del 89% de los votos, seguido por el empresario Ayachi Zammel, actualmente en prisión, con un 6,9%, y por el político de izquierda Zouhair Maghzaoui, quien solía apoyar a Saied y ahora compite contra él, con un 3,9 por ciento.
Más de 9,7 millones de electores estaban inscritos para estos comicios en Túnez, país norteafricano considerado la cuna de las revueltas democráticas de la “Primavera Árabe” de 2011.
Después de conocerse los resultados de los sondeos a pie de urna el domingo, decenas de simpatizantes del presidente saliente salieron a la avenida principal de Túnez para celebrar su victoria, haciendo sonar sus claxon y ondeando banderas frente al teatro municipal. Tras el cierre de casillas, la televisión pública difundió imágenes en las que el mandatario prometía perseguir a los “traidores” y a quienes actúen en contra del país, tal como lo ha venido haciendo durante su mandato.
“Vamos a limpiar al país de todos los corruptos y conspiradores”, declaró Saied desde su sede de campaña.
Saied fue elegido en 2019 con cerca del 73% de los votos y mantenía un alto nivel de popularidad cuando asumió plenos poderes en el verano de 2021, prometiendo restaurar el orden tras varios años de inestabilidad política.
Tres años después, tanto las ONGs tunecinas e internacionales como la oposición han denunciado una “deriva autoritaria” del gobierno, señalando el desmantelamiento de los contrapesos creados en 2011 y la represión de la sociedad civil.
En la nación norteafricana, gran parte de la oposición decidió boicotear las elecciones, calificándolas como una farsa luego de que los principales críticos de Kais Saied fueran encarcelados, junto con periodistas, abogados, activistas y miembros de la sociedad civil.
(Con información de AFP/AP)