Israel aseguró este sábado que las fuerzas armadas han matado a unos 440 terroristas de Hezbollah durante sus incursiones en el sur del Líbano, que comenzaron en la madrugada del martes pasado.
“Estamos empujando a Hezbollah hacia el norte. Algunos terroristas huyeron y otros están siendo derrotados por nuestras tropas en combates a corta distancia”, dijo Hagari en una comparecencia en vídeo esta tarde.
Según el portavoz castrense, entre los muertos hay unos 30 comandantes de la milicia, habiendo perdido todos ellos la vida en una combinación de los ataques de la aviación con los combates sobre el terreno.
Durante los movimientos de las tropas en el sur de Líbano, los uniformados de la 98ª División destruyeron un túnel de unos 250 metros que se encontraba a unos 300 metros de la frontera entre Líbano e Israel.
“La infraestructura subterránea fue identificada e investigada durante operaciones a través de la frontera llevadas acabo en las recientes semanas”, añadió Hagari, sin especificar cuándo se produjeron esas operaciones.
En dicho espacio subterráneo los uniformados encontraron “centros de control, equipamientos de combate y un amplio número de armas que las fuerzas Radwan de Hezbollah -un cuerpo de élite- iban a utilizar en una invasión en Israel”.
Además, los soldados hallaron duchas, una cocina, y reservas de comida en el túnel.
Hace más de diez días, Israel lanzó una intensa campaña de bombardeos contra el Líbano, especialmente en el sur, el valle de la Becá -este- y Beirut -en los suburbios del sur, conocidos como Dahye-, pero también en el centro de la capital en dos ocasiones.
El pasado martes, además, emprendió sus operaciones terrestres contra el país vecino, en las que han muerto nueve soldados.
Halevi, insistió esta noche en mantener la presión sobre Hezbollah en el Líbano “sin concesiones”, en unas declaraciones difundidas por las fuerzas armadas israelíes.
“Tenemos que continuar aplicando presión sobre Hezbollah y hacer daño adicional y continuo al enemigo, sin concesiones y sin darle respiro a la organización”, aseveró Halevi.
El militar mantuvo esta postura al término de una reunión para evaluar la situación actual de la guerra en la base militar de la Kirya, en Tel Aviv, en el marco del conflicto contra Hezbollah que el Estado hebreo mantiene sobre territorio libanés.
Esta tarde, el jefe del Comando Norte de Israel, Ori Gordin, aseguró que sus operaciones terrestres en Líbano son “un paso significativo hacia lograr el retorno seguro de los residentes del norte a sus hogares”, en referencia a los más de 60.000 desplazados israelíes desde que comenzaron las hostilidades con Hizbulá junto a la divisoria hace un año.
Del lado libanés, hasta que comenzó la actual escalada de violencia, los desplazados por el fuego israelí se estimaban en unos 90.000.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó este sábado que Israel tiene derecho a defenderse y que responderá a los ataques de Irán tras la andanada de misiles lanzados por Teherán esta semana contra su territorio. “Israel tiene el deber y el derecho a defenderse y responderá a estos ataques y es lo que haremos”, sostuvo el mandatario en una declaración televisada.
Además, afirmó que el ejército de Israel logró destruir “gran parte” del arsenal del grupo terrorista Hezbollah en Líbano y cambió el curso del conflicto.
(Con información de EFE)