El gobierno de Taiwán denunció enérgicamente el reciente lanzamiento de un misil balístico intercontinental por parte de China, instando a Beijing a actuar con “racionalidad y autocontrol” para evitar una escalada de tensiones en la región.
En un comunicado emitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores de Taiwán, se advirtió que estas acciones militares “amenazan gravemente la paz y estabilidad regional” a pesar de los llamados internacionales para preservar la seguridad en el Indopacífico.
“El Ministerio de Asuntos Exteriores insta a China a detener todas las actividades que socavan la paz y estabilidad y aumentan las tensiones. Solo así se podrán satisfacer los intereses y expectativas de los países de la región”, enfatizó la cancillería taiwanesa, dejando claro que la isla seguirá colaborando con “naciones afines” para frenar el avance del autoritarismo en la región.
El lanzamiento del misil, que ocurrió el miércoles a las 08:44 horas (hora local), fue confirmado por el Ejército Popular de Liberación (EPL) chino.
Según el Ministerio de Defensa de China, el misil, que llevaba una ojiva explosiva, fue lanzado al océano Pacífico con el objetivo de evaluar la efectividad del armamento y el entrenamiento militar de las fuerzas armadas chinas. La prueba marca la primera vez en más de 40 años que China realiza públicamente un ejercicio militar de esta naturaleza, lo que ha generado inquietud a nivel internacional.
La falta de transparencia del programa nuclear chino ha sido objeto de críticas, particularmente de Estados Unidos, que estima que China posee más de 500 cabezas nucleares operativas y podría duplicar este arsenal para el año 2030.
Esta demostración de fuerza ocurre en un contexto de crecientes tensiones entre Beijing y Taipei, exacerbadas tras la llegada al poder del nuevo presidente taiwanés, William Lai.
Intimidación china
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Taiwán informó la detección de 43 aeronaves y ocho buques del ejército chino cerca de la isla en las últimas 24 horas, destacando la frecuencia con la que Beijing envía aviones y buques a las cercanías de Taiwán, en un claro intento de intimidación.
Este es el número de incursiones más alto desde el pasado 11 de julio, cuando Taiwán notificó la presencia de 56 aeronaves de guerra chinas en los alrededores de su territorio, lo que en su momento supuso una de las cifras más elevadas jamás registradas.
Las maniobras militares de China se han vuelto una constante desde que el gobierno comunista reafirmara su intención de recuperar el control sobre Taiwán, incluso mediante el uso de la fuerza si fuera necesario.
La creciente presión militar del régimen chino ha encontrado respuesta en la comunidad internacional. Un barco militar de Japón cruzó el estrecho de Taiwán recientemente, marcando un hito en la defensa de la libertad de navegación en estas aguas disputadas.
Aunque el gobierno japonés no ha confirmado oficialmente el tránsito, la operación se suma a las iniciativas de otros países como Estados Unidos, Canadá y Alemania, cuyas fuerzas navales también han navegado por el estrecho en defensa del derecho a la libre circulación en la zona.
El contexto de esta operación naval japonesa está vinculado al reciente paso del portaviones Liaoning y otros buques de guerra chinos cerca de las costas de Okinawa, Japón, lo que fue calificado por el gobierno japonés como “totalmente inaceptable”.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, habría autorizado el tránsito del buque militar por el estrecho de Taiwán como respuesta directa a la provocación china, según el diario japonés Yomiuri Shimbun.
(Con información de EFE y AFP)