Más de 200 personas murieron en Vietnam a raíz del paso del tifón Yagi y 128 están desaparecidas debido a inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra, informaron el jueves medios estatales.
El periódico vietnamita VNExpress informó que más de 200 personas murieron y más de 800 resultaron heridas.
En la capital, las aguas de la inundación del río Rojo retrocedieron ligeramente, pero muchas zonas todavía estaban inundadas con el agua hasta el cuello en algunos lugares.
En el distrito de Tay Ho de Hanoi, la gente tuvo que caminar a través de aguas fangosas y marrones hasta las rodillas para avanzar por una calle; algunos todavía llevaban puestos sus cascos de bicicleta y motocicleta después de abandonar sus vehículos en el camino.
Algunos remaron por la carretera en pequeñas embarcaciones mientras botellas de agua vacías, una hielera de poliestireno y otros restos flotaban a la deriva; un hombre empujó su motocicleta hacia terreno más seco en un balandro de aluminio.
Los peatones se subieron los pantalones cortos lo más alto posible para evitar ser empapados por la estela causada por un camión de reparto que avanzaba a través del agua.
Mai Anh, propietaria de una panadería, evacuó el área con su familia para refugiarse con sus padres, pero regresó el jueves para revisar su tienda y encontró más de dos pies (medio metro) de agua todavía adentro.
“No puedo hacer negocios con esta inundación”, dijo. “Los productos de mi tienda están todos destruidos”.
Según se informa, las inundaciones en Hanoi han sido las peores en dos décadas.
Los residentes comenzaron a evacuar el área el martes debido a que las aguas de la inundación aumentaron y la electricidad y el agua potable están cortados desde el miércoles.
Las aguas de la inundación dañaron las puertas de la casa de Hoang Anh Tu, en la que tiene una cervecería. Aunque él y su familia pudieron mudarse a la casa de sus padres, tuvieron que turnarse para vigilar el edificio.
“Es muy difícil”, dijo. “Ni siquiera hemos podido evaluar los daños porque la inundación llegó muy rápido”.
Yagi fue el tifón más fuerte que azotó el país del sudeste asiático en décadas. Tocó tierra el sábado con vientos de hasta 149 kilómetros por hora (92 millas por hora). A pesar de debilitarse el domingo, las lluvias continuaron y los ríos siguen peligrosamente altos.
El número de muertos se disparó a principios de semana cuando una inundación repentina arrasó toda la aldea de Lang Nu en la provincia de Lao Cai, en el norte de Vietnam, el martes.
Cientos de rescatistas trabajaron incansablemente el miércoles para buscar sobrevivientes, pero hasta el jueves por la mañana 53 aldeanos seguían desaparecidos, informó VNExpress, mientras que se encontraron siete cuerpos más, lo que eleva el número de muertos a 42.
Las inundaciones y los deslizamientos de tierra han causado la mayoría de las muertes, muchas de las cuales se han producido en la provincia noroccidental de Lao Cai, fronteriza con China, donde se encuentra Lang Nu. La provincia de Lao Cai también alberga el popular destino de senderismo de Sapa.
El lunes, un puente se derrumbó y un autobús fue arrastrado por las inundaciones, matando a decenas de personas.
El puente de acero de la provincia de Phu Tho sobre el desbordado río Rojo se derrumbó, arrojando al río 10 automóviles y camiones junto con dos motocicletas. El autobús que transportaba a 20 personas fue arrastrado a un arroyo inundado por un deslizamiento de tierra en la montañosa provincia de Cao Bang.
Los expertos dicen que tormentas como el tifón Yagi se están haciendo más fuertes debido al cambio climático, ya que las aguas oceánicas más cálidas proporcionan más energía para alimentarlas, lo que genera vientos más fuertes y lluvias más intensas.
(con información de AP y AFP)