Una ciudadana turco estadounidense identificada por Jerusalem Post como Aysenur Ezgi Eygi, de 26 años, participaba en una protesta contra la expansión de los asentamientos en Cisjordania este viernes cuando murió debido a las heridas provocadas por un disparo en la cabeza que la agencia oficial de noticias palestina WAFA atribuyó a las tropas israelíes.
El ejército de Israel dijo que estaba investigando la información, mientras que el gobierno de Estados Unidos dijo que sigue el hecho: “Le damos nuestras más sentidas condolencias a su familia y sus allegados. Buscamos urgentemente más información sobre las circunstancias de su muerte y podremos decir más cuando la tengamos”, declaró el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Fouad Nafaa, director del Hospital Rafidia de Nablus, dijo a Reuters que la mujer llegó al hospital en estado muy crítico, con una grave herida en la cabeza.
“Intentamos practicarle una operación de reanimación, pero desgraciadamente murió”, dijo. WAFA dijo que el incidente se produjo durante una marcha de protesta regular de activistas en Beita, localidad cercana a la ciudad de Nablus que ha sido testigo de repetidos ataques de colonos.
Ward Basalat, médico de urgencias del hospital, reafirmó que la mujer recibió un disparo en la cabeza y murió poco después de llegar al hospital.
El aumento de los ataques violentos de colonos israelíes contra aldeas palestinas de Cisjordania ha provocado un creciente enfado entre los aliados occidentales de Israel, incluido Estados Unidos, que ha impuesto sanciones a varias personas.
El incidente del viernes se produce unas semanas después de que un centenar de colonos atacaran la aldea de Jit, en el norte de Cisjordania, lo que provocó la condena mundial y la promesa del Gobierno de actuar rápidamente contra cualquiera que fuera declarado culpable de violencia.
Hace un mes, el ciudadano estadounidense Amado Sison afirmó que fue baleado en una pierna por las fuerzas israelíes cuando intentaba huir de los gases lacrimógenos y disparos.
Palestinos y grupos de defensa de los derechos humanos acusan periódicamente a las fuerzas israelíes de permanecer impasibles ante los ataques e incluso de participar en ellos.
Con información de Reuters y AP