La Organización Mundial de la Salud (OMS) reavivó este jueves la polémica sobre la falta de transparencia de las autoridades chinas sobre el origen del virus que provocó la pandemia de covid-19, asegurando que si éstas no son más transparentes, el inicio de aquella crisis sanitaria seguirá siendo un misterio.
“A menos que China comparta sus datos, los orígenes de la covid-19 continuarán siendo totalmente desconocidos”, señaló en su rueda de prensa semanal el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
“La colaboración de China es absolutamente crítica para encontrar los orígenes, incluyendo información sobre los primeros casos, sobre el mercado de Huanan (donde se registraron esos contagios iniciales) y de los trabajos llevados a cabo en los laboratorios de Wuhan”, señaló Tedros, quien advirtió que mientras no haya datos completos “todas las hipótesis están en el aire”.
Durante la pandemia, se barajó la teoría de que el coronavirus escapara de forma accidental de algún laboratorio de bioseguridad chino, lo que según los expertos de la OMS que visitaron el país asiático para investigar los orígenes de la pandemia era la menos probable de las hipótesis pero no completamente descartable.
La controversia en torno a los orígenes del virus enfrentó durante años a China y a países como Estados Unidos, cuyas autoridades llegaron a pedir a la OMS que investigaran de forma prioritaria la posibilidad del escape del patógeno de un laboratorio, algo que causó indignación en el régimen comunista chino.
Tedros ha vuelto a poner la cuestión sobre la mesa con motivo de la publicación este miércoles de una guía para que los Estados miembros sepan qué cuestiones estudiar a la hora de analizar los orígenes de nuevos patógenos con potencial para causar epidemias o pandemias.
“Entender cuándo, dónde y cómo empiezan los brotes de pandemias y epidemias es muy difícil, pero es un imperativo científico para intentar evitar otros futuros”, destacó Tedros.
La OMS actualizó la lista de virus y bacterias que podrían causar la próxima pandemia
La OMS también les solicitó a investigadores y gobiernos expandir la investigación sobre patógenos que podrían evolucionar y causar futuras pandemias.
Entre estos patógenos se encuentran los responsables de enfermedades como la gripe, el COVID-19 y la tuberculosis, además de otros. Esta recomendación cuenta con el respaldo de la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias (CEPI), una organización público-privada de la que forma parte la Fundación Bill y Melinda Gates y gobiernos como el de Alemania, Japón, Noruega, entre otros, que tiene como objetivo financiar proyectos de investigación independientes para desarrollar vacunas contra enfermedades infecciosas emergentes.
En un comunicado de prensa, la OMS precisó que junto a la CEPI “han subrayado la importancia de ampliar la investigación para englobar familias enteras de patógenos que pueden infectar a los seres humanos —independientemente de su presunto riesgo pandémico— y de centrarse en patógenos concretos”.
Entre los patógenos prioritarios que podrían desencadenar la próxima pandemia se encuentran el virus de la gripe A, el virus del dengue y el Mpox o viruela símica, anteriormente conocida como viruela del mono, según una lista actualizada por la OMS.
“Con este método se propone utilizar prototipos de patógenos como guías o precursores para establecer la base de conocimientos de familias enteras de patógenos”, detallaron en la publicación. Y ampliaron: “Con esta estrategia se pretende también acelerar la vigilancia y la investigación con el fin de comprender la transmisión de los patógenos, cómo infectan a los seres humanos y cómo responde a ellos el sistema inmunitario”.
Estos postulados forman parte de un informe presentado por la OMS durante la Cumbre Mundial de Preparación para Pandemias celebrada esta semana en Brasil. “Necesitamos que la ciencia y la determinación política se unan mientras nos preparamos para la próxima pandemia”, declaró el director general de la OMS.
(Con información de EFE)