La Unión Europea (UE) condenó las “peligrosas acciones” de buques de la Guardia Costera china en el banco de arena de Sabina, donde una embarcación embistió el sábado en hasta tres ocasiones a un buque de la Guardia Costera filipina en las disputadas aguas del Mar Meridional.
Por medio de un comunicado, Bruselas expresó su condena por “las peligrosas acciones de los buques de la Guardia Costera china contra las legítimas operaciones marítimas filipinas en la zona del banco de arena de Sabina”.
El Servicio Europeo de Acción Exterior ha recordado que este incidente “es el último de una serie que durante el mes pasado han puesto en peligro la seguridad de la vida marina en contra del derecho a la libre navegación del que gozan las naciones conforme al derecho internacional”.
El bloque continental menciona, además, el arbitraje de 2016 sobre el contencioso territorial en esta zona que “incluye en particular la prohibición del uso de la fuerza de coerción y el derecho a la libertad de navegación”.
En ese sentido, “la UE condena cualquier acción ilegal, de escalada y coercitiva que socaven estos principios del derecho internacional y amenacen la paz y la estabilidad en la región”. “La UE pide una desescalada de las tensiones y sigue apoyando a sus socios para que puedan ejercer sus derechos legítimos en la región y más allá”, concluye el texto.
Asimismo, la portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), Nabila Massrali, recordó que la UE mantiene su compromiso de apoyar a sus socios que “tratan de ejercer sus derechos legítimos en la región y fuera de ella”.
Esas normas incluyen específicamente la prohibición del uso de la fuerza o la coacción y el derecho a la libertad de navegación, precisó en un comunicado la portavoz del SEAE, que dirige el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
China reclama la mayor parte de las aguas de la zona por considerar que son parte de su territorio al figurar dentro de la llamada “línea de los nueve puntos” que aparece en los mapas del gigante asiático -una línea trazada por el régimen chino que reclama como suyo el mar de China Meridional, incluidas las islas Paracelso y Spratly-.
Las relaciones entre China y Filipinas han sufrido un aumento de las tensiones durante los últimos meses. Manila ha acusado a Pekín de obstaculizar sus misiones de abastecimiento de tropas dentro de lo que considera como su zona económica exclusiva, mientras que China insiste en que los buques filipinos transitan estas aguas de forma ilegal.
El incidente de este fin de semana tuvo lugar cerca del atolón Sabina (conocido por China como Xianbin Jiao), disputado entre ambos países y que forma parte de las islas Spratly, en el mar de China Meridional.
(Con información de Europa Press y EFE)