Los rebeldes hutíes de Yemen reivindicaron un nuevo ataque a un barco portacontenedores en el golfo de Adén

El grupo terrorista lanzó misiles y drones contra el buque Groton y aseguró que “fue alcanzado con precisión”

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Imagen de archivo del portacontenedores
Imagen de archivo del portacontenedores Groton

Los rebeldes hutíes de Yemen reivindicaron este sábado un ataque con misiles y drones contra el portacontenedores Groton, un carguero que a principios de agosto ya había sido objetivo de estos milicianos, a falta de unas horas para que den comienzo las operaciones de remolque del petrolero en llamas en el mar Rojo.

El portavoz militar de los hutíes, Yahya Sarea, dijo en un comunicado que la operación fue realizada con drones y misiles, mientras que aseguró que “el buque fue alcanzado con precisión y recibió un impacto directo”.

Asimismo, indicó que el ataque se produjo en el golfo de Aden, puerta de entrada al mar Rojo, y que tuvo lugar debido a que la compañía propietaria del buque supuestamente opera cargueros que se dirigen a puertos de Israel, algo que los terroristas tratan de impedir mediante sus operaciones.

Este es el segundo ataque contra el portacontenedores con bandera de Liberia, contra el que el pasado 3 de agosto los hutíes ya lanzaron una andanada de misiles balísticos y un proyectil impactara contra el buque, aunque pudo continuar con su ruta hasta su puerto de destino.

Sin embargo, esta vez se desconoce si el ataque produjo daños en la embarcación, ya que la entidad de la Marina británica Operaciones Marítimas Comerciales (UKMTO) informó anoche de que dos misiles impactaron cerca de un barco comercial, que siguió navegando.

Los hutíes "autorizaron" el remolque
Los hutíes "autorizaron" el remolque del petrolero griego que incendiaron en el mar Rojo el pasado 21 de agosto (Foto: EuropaPress)

Remolque de un petrolero incendiado

Esta nueva acción terrorista tiene lugar a falta de unas horas para que, según los hutíes, comience la operación para remolcar el petrolero griego ‘M/V Sounion’, que se encuentra en llamas en el mar Rojo con unas 150.000 toneladas de crudo a bordo tras ser atacado por los insurgentes el pasado día 21.

A pesar de que los rebeldes han “autorizado” la operación de rescate del buque -que supone una gran amenaza para el medioambiente por el riesgo de un gran vertido de petróleo en el mar-, han seguido amenazando con atacar cualquier buque que se dirija a Israel como parte de su campaña de apoyo al grupo terrorista palestino Hamas hasta que se ponga fin a la guerra en la Franja de Gaza.

“Se espera que los (barcos) remolcadores lleguen este domingo para comenzar a remolcar el buque Sounion”, indicó en su cuenta de X el ministro de Exteriores de los hutíes, Jamal Amer, sin especificar qué países u organización se hará cargo del petrolero, atacado por los insurgentes hace diez días.

Añadió que hace unos días las autoridades hutíes “permitieron la retirada del barco (...) en cumplimiento con las directrices del comandante Abdelmalek Badr al Din al Huti”, en referencia al líder de los rebeldes yemeníes. Asimismo, recordó que el petrolero fue atacado por mantener algún tipo de vinculación con Israel.

Los rebeldes hutíes de Yemén mostraron cómo hicieron explotar el petrolero griego en el Mar Rojo

Los hutíes anunciaron el 28 de agosto que permitirían el remolque del ‘M/V Sounion’ después de que “varias partes internacionales, en particular de Europa”, se pusieran en contacto con el grupo ante la potencial catástrofe medioambiental que podría suponer el derrame de un buque cargado con un millón de barriles de petróleo.

El Gobierno de Grecia, por su parte, informó a la Organización Marítima Internacional (OMI) de que se ha detectado “un potencial derrame de petróleo de una longitud de 2,2 millas náuticas”, según imágenes satelitales obtenidas por la Agencia Europea de Seguridad Marítima (AESM).

Por ello, el Ejecutivo griego hizo un llamamiento “a todas las naciones y a todos los actores involucrados a ayudar a prevenir el riesgo ambiental y resolver la situación lo antes posible”.

Tras ser atacado el pasado 21 de agosto, los hutíes realizaron dos días después una serie de acciones en el buque, entre ellas la colocación de explosivos que posteriormente detonaron, provocando que el barco se encuentre ardiendo hasta la fecha. El volumen de 150.000 toneladas de crudo que carga el petrolero es cuatro veces mayor que el vertido en el desastre del Exxon Valdez (1989), una de las mayores tragedias ambientales de Estados Unidos, que acabó con enormes consecuencias para la fauna de Alaska.

(Con información de EFE)

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