Al menos dos personas han muerto y diez más han resultado heridas en un bombardeo ruso sobre un edificio residencial de Cherkasi Lozova, en la región ucraniana de Kharkiv, según han informado las autoridades ucranianas, lo que eleva a nueve los fallecidos y a 107 los heridos en las últimas horas.
“Han muerto dos mujeres. Una de ellas ha podido ser extraída de debajo de los escombros. La otra ha muerto en una ambulancia”, ha explicado el gobernador militar de Kharkiv, Oleg Sinegubov, en su cuenta en la red social Telegram. “Hay diez personas heridas, incluidos dos niños”, ha añadido.
Sinegubov había informado previamente de que entre los muertos hay una niña de 14 años y 22 menores más heridos de diversa consideración por la explosión de varias bombas aéreas contra un edificio residencial de doce pisos.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha denunciado que estos ataques iban dirigidos de manera “directa” contra la población civil y ha resaltado la labor de los servicios de emergencia a la hora de atender a las víctimas y buscar a posibles damnificados entre los escombros.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, opinó que la incursión del Ejército ucraniano sobre la región rusa de Kursk responde al derecho a la autodefensa de Ucrania y que, por tanto, es “legítima”.
“Los soldados, tanques y bases rusos son objetivos legítimos según el Derecho Internacional”, indicó Stoltenberg en declaraciones al diario alemán Welt am Sonntag, argumentando que el objetivo de esta ofensiva no era otro que establecer una “zona de amortiguación para disuadir a Rusia de nuevos ataques a través de la frontera”.
“Y según el Derecho Internacional, este derecho no termina en la frontera”, añadió el secretario, agregando que “es decisión de Ucrania (elegir) cómo defenderse”.
No obstante, el representante de la Alianza Atlántica ha aclarado que “Ucrania no discutió de antemano su planificación para la ofensiva de Kursk con la OTAN”, por lo que, “en este sentido, la OTAN no jugó ningún papel”.
No obstante, el representante de la Alianza Atlántica ha aclarado que “Ucrania no discutió de antemano su planificación para la ofensiva de Kursk con la OTAN”, por lo que, “en este sentido, la OTAN no jugó ningún papel”.
“Esto es vital para que Ucrania pueda repeler la invasión rusa”, apostilló.
Ucrania inició a comienzos de mes una incursión terrestre sobre Kursk a través de la región fronteriza de Sumi. Desde entonces, sus tropas han logrado tomar el control de cerca de 100 localidades y 1.300 kilómetros cuadrados. El Ministerio de Defensa de Rusia informó que al menos 4.700 militares de las fuerzas ucranianas han fallecido en el marco de la incursión.
(Con información de Europa Press)