El Ejército de Israel frustró un ataque planificado por el grupo terrorista Hezbollah contra el centro de Israel la madrugada de este domingo, gracias a una serie de bombardeos preventivos llevados a cabo en el sur de Líbano.
Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el grupo terrorista, respaldado por Irán, estaba preparando un ataque a gran escala con proyectiles y drones, que fue evitado mediante la intervención de la Fuerza Aérea israelí.
Durante los ataques preventivos, las FDI informaron que se destruyeron miles de lanzadores de cohetes de Hezbollah, la mayoría de los cuales apuntaban hacia el norte de Israel, pero algunos tenían como objetivo el centro del país. En total, alrededor de 100 aviones de combate israelíes participaron en la operación para neutralizar la amenaza.
El portavoz para la prensa internacional del Ejército israelí, Nadav Shoshani, detalló que los lanzacohetes estaban concentrados en unos 40 lugares de lanzamiento a lo largo del sur de Líbano.
Shoshani subrayó que de momento se han detectado “muy pocos daños” en el norte del país.
El grupo terrorista Hezbollah emitió un comunicado confirmando el lanzamiento de más de 320 cohetes Katyusha y una gran cantidad de drones hacia Israel, como parte de su “respuesta inicial” a la muerte de su comandante militar Fuad Shukr.
La organización armada afirmó haber atacado varias posiciones israelíes, incluyendo bases militares y plataformas del sistema Cúpula de Hierro, y advirtió que sus operaciones militares tomarán tiempo en completarse.
Ante la amenaza, el gobierno israelí declaró un estado de emergencia de 48 horas y advirtió a sus ciudadanos sobre posibles ataques inminentes con misiles y drones.
El portavoz militar israelí, Daniel Hagari, alertó que Hezbollah estaba preparando un gran ataque desde áreas cercanas a hogares de civiles en el sur de Líbano, poniendo en peligro a los residentes de esas zonas.
Israel ha mantenido comunicación constante con Estados Unidos durante esta escalada de tensiones. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, Sean Savett, reafirmó el “compromiso inquebrantable” de Washington con la defensa de Israel, y el Pentágono indicó que está listo para apoyar a su aliado en caso de que la situación se agrave.
Hezbollah se solidarizó con el grupo islamista Hamas en su guerra contra Israel en octubre pasado, y desde entonces, la violencia en la frontera entre Israel y Líbano es la más grave desde la guerra de 2006.
En concreto, se ha cobrado la vida desde octubre de más de 630 personas, la mayoría en Líbano y en las filas de Hezbollah, que ha confirmado unas 400 bajas, además de unos 124 civiles libaneses.
En Israel han muerto 49 personas en el norte: 23 militares y 26 civiles, incluidos 12 menores en el ataque en la ciudad drusa de Majdal Shams, en los Altos del Golán.
(Con información de AFP y EFE)