Polonia acusó de espionaje a un periodista ruso-español excarcelado en el canje de prisioneros entre Moscú y Occidente

Fiscales señalan que Pablo González proporcionó información al organismo de Inteligencia del Ejército ruso desde abril de 2016 hasta febrero de 2022 en Przemysl, Varsovia y otras ciudades polacas

Guardar

Nuevo

Pablo González,  segundo de izquierda derecha con la cabeza rapada, escucha al presidente ruso Vladimir Putin  (Gavriil Grigorov, Sputnik, Kremlin vía AP)
Pablo González, segundo de izquierda derecha con la cabeza rapada, escucha al presidente ruso Vladimir Putin (Gavriil Grigorov, Sputnik, Kremlin vía AP)

Fiscales polacos dijeron el miércoles que acusaron formalmente de espionaje a un hombre ruso-español, días después de que Polonia lo liberó de prisión a principios de este mes para que pudiera ser incluido en un canje de prisioneros entre Rusia y Occidente.

Pavel Rubtsov, mejor conocido como Pablo González, fue arrestado el 28 de febrero de 2022 en Przemysl, una ciudad polaca cerca de la frontera con Ucrania, días después de que Rusia invadió el país. Se presentaba como periodista español independiente y enviaba reportes a medios españoles. Vivía en Polonia desde 2019.

Estuvo detenido en Polonia hasta que se le incluyó en el canje de prisioneros, el 1 de agosto, y actualmente está en Rusia. Hasta el momento, se ignora por qué Polonia esperó hasta que el hombre salió del país para acusarlo.

Nacido como Pavel Rubtsov en 1982 en Moscú, en la entonces Unión Soviética, González se fue a España cuando tenía 9 años, con su madre de esa nacionalidad, y adquirió la ciudadanía y recibió el nombre español de Pablo González Yagüe. Se dedicó al periodismo, trabajando para Público, La Sexta y Gara, un diario nacionalista vasco.

Richard Moore, director de la agencia de inteligencia extranjera del Reino Unido, conocida como M16, dijo en 2022, en el Foro de Seguridad de Aspen, que González era un “ilegal” que fue arrestado en Polonia tras “hacerse pasar por un periodista español” y que trataba de entrar a Ucrania para integrarse a los esfuerzos rusos de desestabilización en ese país.

El término “ilegal” se refiere a los espías que operan bajo un encubrimiento no oficial, lo que significa que no gozan de inmunidad diplomática.

El periodista ruso-español Pablo González, acusado de espiar para el Kremlin (Foto: EuropaPress)
El periodista ruso-español Pablo González, acusado de espiar para el Kremlin (Foto: EuropaPress)

Según informes periodísticos de investigación, el hombre también buscó establecer contactos con disidentes rusos que vivían en el extranjero, y tenía contactos con movimientos separatistas vascos y catalanes, presuntamente vinculados con el Kremlin.

La fiscalía nacional de Varsovia dijo que un fiscal de la ciudad de Lublin presentó la acusación el 9 de octubre ante el Tribunal de Distrito de Przemysl. Identificaron al acusado como Pablo G. Y. y Pavel R., sin revelar sus apellidos, de conformidad con las leyes de privacidad de Polonia. Sin embargo, los detalles dejan claro que el caso se refiere a Rubtsov, presunto agente del GRU, la agencia rusa de inteligencia.

El individuo está acusado de cometer un delito relacionado con el espionaje, que puede acarrear una pena de prisión de tres a 15 años.

Aún no se sabe si Rubtsov será juzgado en ausencia.

En el comunicado se indica que el hombre está acusado de proporcionar información al organismo de inteligencia del ejército ruso desde abril de 2016 hasta febrero de 2022 en Przemysl, Varsovia y otras partes, “lo que podría causar daños a la República de Polonia, incluso como Estado miembro de la OTAN”.

Asimismo, se indica que la actividad también incluía “propagar desinformación y llevar a cabo reconocimiento operativo”.

La fiscalía nacional también dijo que se realizan investigaciones sobre un número no especificado de presuntos coconspiradores, entre ellos, una mujer a la que identifican únicamente como Magdalena Ch. La mujer, conocida como su exnovia entre los periodistas de Polonia, se rehusó a comentar.

(AP)

Guardar

Nuevo