Un turista fue atacado por un cocodrilo en Australia. Dave Hogbin, un médico de 40 años originario de Newcastle, Nueva Gales del Sur, estaba de vacaciones con su familia cuando cayó en un río y falleció tras ser atacado por el animal. “El último acto de Dave fue dejar que su esposa lo soltara, a pesar de saber que eso significaba su final”, declaró su esposa Jane Hogbin. “Él me salvó la vida”, añadió Jane.
Las autoridades encontraron restos humanos dentro de un cocodrilo de 4,8 metros de largo, lo que se cree que corresponde a Hogbin, según confirmó CBS News. “En la autopsia del cocodrilo, encontramos restos humanos que creemos que corresponden a Hogbin, aunque se realizarán pruebas adicionales para confirmarlo”, señaló un comunicado de la policía citado por el mismo medio.
Dave Hogbin se graduó en la Universidad de Notre Dame en 2014. Durante su tiempo libre, disfrutaba del camping y conducir por terrenos difíciles con su familia. Crocodile Bend, donde ocurrió el incidente, es un lugar famoso entre los turistas por la observación de cocodrilos.
Jane Hogbin explicó que el accidente se produjo cuando la orilla del río, a unos 5 metros por encima del nivel del agua, colapsó. “Escuché el chapoteo cuando cayó y corrí para ayudarlo, pero la pendiente era muy empinada y resbaladiza”, dijo a CBS News. “Debido a la inclinación y la inestabilidad de la orilla, él no pudo salir del agua”.
El ataque mortal es el segundo en un mes en Australia. Los rangers de vida silvestre identificaron al cocodrilo sospechoso gracias a las cicatrices en su hocico que coincidían con las descripciones de testigos del lugar del incidente. El cocodrilo fue sacrificado en una corriente a 4 kilómetros de donde Hogbin desapareció.
De especie protegida a amenaza
Este evento se suma también a una serie de ataques de cocodrilos en Australia este año. Según medios locales, una niña de 12 años murió el 2 de julio en el Territorio del Norte y, en abril, un adolescente de 16 años perdió la vida mientras nadaba en la isla Fraser, en Queensland. Estos incidentes han llevado a un total de tres ataques fatales en lo que va del año, cerca del récord anual de cuatro muertes en 2014, según reportó el diario The Guardian.
La población de cocodrilos ha aumentado significativamente en el norte tropical de Australia desde que se les declaró especie protegida en los años 70. Este auge poblacional ha generado encuentros peligrosos con seres humanos.
Durante uno de estos encuentros, un hombre fue atacado por un cocodrilo mientras pescaba en un río, tras lo cual el reptil fue cocinado y comido por los residentes locales. El mismo mes, un hombre que buceaba en las aguas de Queensland logró sobrevivir a un ataque de cocodrilo abriendo las mandíbulas del animal con sus manos. En mayo de 2023, se encontraron restos de un hombre australiano desaparecido en dos cocodrilos después de haber estado pescando en aguas infestadas de estos reptiles.
“Los cocodrilos son muy móviles y altamente peligrosos”, afirmó el Superintendente Jefe Interino de Policía Shane Holmes. Las autoridades locales expresan su preocupación por los crecientes encuentros y ataques de cocodrilos en la región mientras procuran implementar medidas de seguridad. “La necesidad de concienciar sobre los riesgos y la precaución al visitar áreas cercanas a los hábitats de cocodrilos es más urgente que nunca”, añadió Holmes.