Israel denunció el ataque de Hezbollah de este sábado en los Altos del Golán como el “más grave a ciudadanos inocentes” desde el 7 de octubre y prometió una respuesta.
“El suceso de esta noche supone el daño más grave a ciudadanos inocentes” desde las masacres de aquel sábado, apuntó el portavoz del Ejército Daniel Hagari, en referencia a la muerte de al menos doce niños y las lesiones en otros más de veinte jóvenes que fueron alcanzados durante la tarde noche por un proyectil disparado por el grupo chií libanés mientras jugaban un partido de fútbol en un campo en la localidad de Majdal Shams.
“Podemos confirmar que Hezbollah mató a los niños en este brutal ataque (...) Hezbollah está atacando a nuestros ciudadanos en el norte, disparando miles de cohetes, misiles y vehículos aéreos no tripulados, apuntando a hogares de familias y comunidades”, denunció a continuación, antes de adelantar que se llevará a cabo una respuesta contundente.
Con el correr de las horas y el avance de la investigación, Hagari precisó que se trató de un cohete iraní Falaq-1, fabricado en Irán, “con una ojiva de más de 50 kilogramos de explosivos” y que “sólo utiliza el grupo terrorista Hezbollah, que llevó a cabo este ataque desde Chebaa”.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel están llevando a cabo una evaluación de la situación y nos prepararemos para una respuesta contra Hezbollah. Terminaremos nuestras evaluaciones y actuaremos”, prometió poco después de que se convocara a una reunión de emergencia en el Ministerio de Defensa y mientras el primer ministro Benjamin Netanyahu anunciaba su regreso adelantado al país para abordar el tema en primera persona lo antes posible.
El líder de la cartera, Yoav Gallant, “determinó los cursos de acción e instruyó al establecimiento de Defensa en consecuencia”, indicaron desde su oficina al término del encuentro. A la par, este domingo a las 16:00 hora local se llevará a cabo una reunión con el gabinete de seguridad en Tel Aviv, ya con la presencia del mandatario.
En tanto, Netanyahu se comunicó con el líder druso israelí, Muafak Tarif, y le dejó en claro que “Israel no permitirá que el ataque asesino pase desapercibido y Hezbollah pagará por ello un alto precio que aún no ha pagado”.
La víspera, desde el Ejército habían reiterado que estaban preparándose para lanzar una “ofensiva decisiva” y que continuaban “comprometidos a cambiar la realidad de la seguridad en el norte y que todos los vecinos puedan regresar a sus hogares”.
“Esta es la comunidad drusa de israel, son ciudadanos israelíes, forman parte de Israel” y los “defenderemos”, agregó Hagari.
Por otro lado, envió sus condolencias a las familias de las víctimas y los heridos. “Nuestros pensamientos están con ellos. Los abrazamos y esperamos que se recuperen pronto”, dijo.
En la tarde noche de este sábado, Hezbollah lanzó un ataque con más de 80 proyectiles contra el norte de Israel. La mayoría de ellos fueron interceptados y otro tanto cayó en zonas abiertas, sin dejar heridos o daños, aunque uno no logró ser neutralizado por el sistema de defensa antiaérea e impactó en una cancha de fútbol, donde un grupo de jóvenes de entre 10 y 20 años jugaba un partido. Como consecuencia, al menos doce niños fallecieron y otros 20 resultaron heridos.
De inmediato se movilizó unidades de la policía y del servicio de salud local, quienes aseguraron que “fuimos testigos de una gran destrucción”. “Había objetos en llamas, víctimas en el césped... la escena era espantosa. Inmediatamente empezamos a tratar a los heridos y algunos fueron llevados a clínicas locales”, dijo uno de los médicos.
“Este ataque muestra la verdadera cara de Hezbollah, una organización terrorista que ataca y asesina a niños que juegan al fútbol un sábado por la tarde. Actuaremos para restablecer la plena seguridad en nuestra frontera norte para todos los ciudadanos del Estado de Israel”, agregó Hagari, que rechazó la distancia que el grupo tomó sobre el hecho.
“Es mentira. Hezbollah está detrás”, insistió basándose en los primeros resultados de la investigación y en información de inteligencia.
El presidente israelí, Isaac Herzog, manifestó su repudio al ataque y lamentó este “terrible e impactante desastre”, que dejó imágenes “verdaderamente desgarradoras”. “No hay palabras que puedan consolar a las familias de las jóvenes víctimas que perdieron la vida sin culpa alguna. Hezbollah, armado y financiado por Irán, no distingue entre niños y adultos, soldados y civiles, judíos o musulmanes”, sentenció.
En ese sentido, pidió a la comunidad internacional no ser indiferentes ante estos crímenes “que se producen a instancias del imperio del mal en Irán”, acusado de apoyar y financiar a estos grupos terroristas.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, apuntó que Hezbollah “cruzó todas las líneas rojas” ya que “no se trata de un ejército contra otro ejército” sino “de una organización terrorista iraní contra civiles y niños”. “Se está acercando el momento de una guerra total contra Hezbollah y el Líbano”, advirtió y aseguró que el líder enemigo Hassan Nasrallah será eliminado junto a su organización.
La misión de la ONU en el Líbano se comunicó con las partes en conflicto en un intento por rebajar las tensiones tras el ataque de este sábado, aunque la formación terrorista se mantiene firme en su inocencia e Israel evalúa con convicción una respuesta.