El gobierno alemán prohibió el miércoles una organización acusada de ser un “puesto de avanzada” de la teocracia iraní, promover la ideología de su dirigencia y apoyar al grupo militante libanés Hezbollah. La policía allanó 53 propiedades en todo el país, incluida una importante mezquita en Hamburgo.
La prohibición del Centro Islámico de Hamburgo (IZH) y de cinco suborganizaciones en toda Alemania se produjo tras los registros realizados en noviembre. La ministra del Interior, Nancy Faeser, dijo que las pruebas reunidas en la investigación “confirmaron las graves sospechas hasta tal punto que ordenamos la prohibición hoy”.
El IZH “promueve una ideología totalitaria, extremista e islamista en Alemania”, mientras que él y sus suborganizaciones “también apoyan a los terroristas de Hezbolá y difunden un antisemitismo agresivo”, dijo Faeser en un comunicado.
Su ministerio afirmó que “como representante directo del ‘Líder Supremo de la Revolución Islámica’ de Irán, el IZH difunde la ideología de la Revolución Islámica de una manera agresiva y militante y busca lograr dicha revolución en la República Federal de Alemania”.
La mezquita del Imán Alí, con sus azulejos azules y la más importante del grupo, se encontraba entre las propiedades allanadas por la policía el miércoles por la mañana. También hubo allanamientos en Berlín y otros seis estados alemanes.
El IZH ha estado bajo la observación de la agencia de inteligencia interior de Alemania durante mucho tiempo, y en su informe anual de 2023 afirmó que es el representante más importante de Irán en Alemania, además de la embajada del país.
Según el comunicado, no existen cifras fiables sobre los miembros o simpatizantes del grupo, fundado en 1962. Desde hace años se ha pedido su prohibición.
El Ministerio del Interior informó de que, debido a la prohibición, se cerrarán cuatro mezquitas chiítas en Alemania. También se confiscarán los bienes de la IZH. Según el ministerio, en Alemania hay entre 150 y 200 congregaciones chiítas, pero subrayó que no se está actuando contra ninguna religión.
El IZH dijo el otoño pasado que “condena toda forma de violencia y extremismo y siempre ha abogado por la paz, la tolerancia y el diálogo interreligioso”.
El Ministerio del Interior afirmó que, si bien el grupo intenta presentarse como una organización tolerante y puramente religiosa sin vínculos políticos ni agenda política, “las investigaciones han confirmado sin lugar a dudas que las actividades del IZH no son simplemente de naturaleza religiosa”. Agregó que el propósito y las actividades del grupo se oponen al orden constitucional alemán.
El máximo responsable de seguridad regional en Hamburgo, Andy Grote, declaró que el grupo ya es “historia”. Afirmó que “el cierre de este puesto avanzado del inhumano régimen iraní es un golpe realmente eficaz contra el extremismo islámico”.
La principal organización judía de Alemania acogió con satisfacción la prohibición. “El régimen de los mulás de Irán y sus aliados están en el mundo entero: su objetivo es la destrucción de la democracia y de nuestro modo de vida”, afirmó Josef Schuster, presidente del Consejo Central de Judíos, en un comunicado.
Hezbolá está prohibido en Alemania. El grupo, que cuenta con el respaldo de Irán, e Israel han intercambiado disparos casi a diario en la frontera entre Líbano e Israel desde que estalló la guerra entre Israel y Hamás en Gaza en octubre.
(con información de AP)