El pasado 20 de junio, con motivo del Día Mundial del Refugiado, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) publicó su informe “Tendencias Globales 2023″, que evidencia la cruda realidad que viven cada vez más personas refugiadas y desplazadas. Actualmente, una de cada 69 personas en todo el mundo se ha visto obligada a huir de su hogar debido a conflictos armados, persecución, violencia, violaciones de derechos humanos, desastres climáticos o acontecimientos que perturban gravemente el orden público. En este contexto, Fundación ACNUR Argentina convoca a la sociedad argentina, una de las más amigables con los refugiados, a brindar apoyo inmediato.
Como consecuencia del fracaso en mantener la paz y la seguridad, hoy existen más de 120 millones de personas refugiadas y desplazadas a nivel global, lo que equivale al 1,5% de la población mundial. Del total, los niños y niñas representan el 40% y las mujeres y niñas el 50%.
En total, al menos 27,2 millones de personas se vieron obligadas a huir durante 2023, y una de cada cuatro huyó a otro país. Durante los últimos 25 años, el número promedio de personas obligadas a huir en un año ha sido de 14,3 millones, mientras que solo entre 2021 y 2023, este promedio ha superado los 27,8 millones, casi el doble que la media de los últimos 25 años. Es evidente que la intensidad de los conflictos recientes ha aumentado.
La frecuencia, el alcance, la duración y la intensidad de los conflictos están estrechamente relacionados con el número de personas obligadas a huir cada año. En Sudán, el conflicto que estalló en abril de 2023 provocó una de las mayores crisis humanitarias y de desplazamiento mundial. A finales de año, casi 11 millones de sudaneses habían huido de sus hogares para salvar sus vidas.
Por otra parte, tras 13 años de crisis en Siria, a finales del 2023 casi 14 millones de sirios estaban desplazados por la fuerza en 137 países. En ese tiempo, también casi 10 millones de ucranianos se encontraban desplazados dentro y fuera de Ucrania a raíz de la guerra.
La crisis climática también es una crisis humanitaria
El reporte de ACNUR “Tendencias Globales 2023″ también informa que el cambio climático pone en riesgo los derechos básicos de las personas refugiadas y desplazadas. Los fenómenos meteorológicos extremos, como sequías, inundaciones y el calor extremo, son cada vez más frecuentes e intensos y a menudo impactan en países que ya experimentan conflictos.
A finales de 2023, casi tres cuartas partes de las personas desplazadas por la fuerza vivían en países con una exposición alta o extrema a los peligros relacionados con el clima y casi la mitad del total de las personas desplazadas por la fuerza vivían en países donde seguían expuestas a conflictos y a peligros relacionados con el clima.
La crisis climática también genera nuevos desplazamientos. En 2023, los desastres climáticos causaron 26.4 millones desplazamientos internos en 148 países y territorios. Se trata de la tercera cifra más alta en la última década.
Argentina, uno de los países más amigables con las personas refugiadas y desplazadas
Según el estudio “Actitudes Globales hacia los Refugiados” realizado por la consultora Ipsos en 52 países con motivo del Día Mundial del Refugiado como todos los años, existe un apoyo público a las personas refugiadas y Argentina es uno de los países que se destaca. Ante la pregunta sobre si las personas deberían poder refugiarse en otros países, incluso el propio, para escapar de la guerra o la persecución, el 80% de los argentinos y las argentinas se mostraron a favor, en tanto que en otros países de América el porcentaje de respuestas positivas fue el siguiente: 76% México; 75% Perú; 73% Colombia; 70% Estados Unidos; y 68% Chile.
Además, el 69% de los encuestados argentinos estuvo de acuerdo con la premisa: “la mayoría de los refugiados que llegan a mi país se integrarán con éxito en su nueva sociedad”. Ante el mismo presupuesto, en otros países de América el porcentaje de conformidad fue: 62% Brasil; 54% Ecuador; 51% Estados Unidos; 50% México; 48% Perú; 43% Colombia; y 37% Chile.
“Hacen falta medidas urgentes para mitigar y abordar la crisis climática, que cada vez afecta con más fuerza a las personas refugiadas y desplazadas. Queremos pedírselas a los líderes mundiales en la próxima Cumbre del Clima, presentando 2 millones de firmas. Por eso necesitamos la ayuda de uno de los países más solidarios y empáticos con los refugiados. Los argentinos y las argentinas todavía estamos a tiempo alzar la voz contra la crisis climática y humanitaria”, sostiene Paula Martínez Álvarez, directora de Comunicaciones de Fundación ACNUR Argentina.
La Fundación invita a toda la sociedad argentina a sumarse a su iniciativa Ponchos Azules por el Clima, firmando en ponchosazules.org. Las firmas serán entregadas en la Conferencia de Las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 29), que se llevará a cabo a partir del 11 de noviembre en Bakú, Azerbaiyán, con el fin de exigirles a los líderes mundiales soluciones duraderas para los desplazados climáticos.