La final de la Copa América 2024 disputada en Miami en la que Argentina se volvió a coronar campeón, esta vez frente a Colombia, fue un lamentable escenario de incidentes violentos y caos que generaron gran repercusión en medios internacionales.
La situación comenzó a deteriorarse horas antes del inicio del partido, cuando una multitud de aficionados colombianos sin entradas intentaron ingresar al estadio por la fuerza. Según muestran incontables videos que circularon por las redes, algunos hinchas intentaron trepar por los conductos de ventilación y saltar las barreras de seguridad. La policía local se vio obligada a intervenir para controlar a los fanáticos, lo que provocó enfrentamientos y retrasó el comienzo del encuentro, luego de que la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol), principal responsable de la organización junto a la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), tomó la decisión de cerrar las puertas del estadio ante la avalancha de personas que intentaron ingresar sin tickets.
Dentro del estadio, la tensión continuó en las gradas, donde se registraron peleas entre seguidores de ambos equipos. Los incidentes obligaron a los organizadores a reforzar la seguridad y a tomar medidas adicionales para evitar mayores disturbios. A pesar de los esfuerzos, el ambiente en el estadio se mantuvo tenso y la violencia fuera del recinto fue una constante durante toda la jornada.
“Lo que ocurrió en el Hard Rock Stadium fue sólo la culminación de un mes de organización desesperada”, escribió el medio inglés The Guardian. “El torneo fue organizado por la Conmebol con poca participación de los funcionarios en el terreno en los Estados Unidos, pero la FIFA debe aprender lecciones antes de que la Copa del Mundo regrese a Estados Unidos en menos de dos años. Incluso antes del caos del domingo, hubo escenas en la semifinal cuando los jugadores de Uruguay se metieron en la tribuna para, según lo vieron, proteger a sus familias de los fanáticos colombianos”.
Bloomberg también apuntó contra la organización: “La final de la Copa América entre Argentina y Colombia debía ser el ensayo general de Miami para el torneo de fútbol de la Copa del Mundo en los Estados Unidos. Horas antes del inicio, todo se convirtió en un caos”.
Por su parte, el periódico italiano La Stampa destacó los disturbios ocurridos fuera del estadio debido a la presencia de numerosos aficionados sin entradas. “Locura en la final de Miami, hinchas sin entradas escalan por los conductos de ventilación”, titularon, mientras que el diario La Repubblica describió la misma situación.
The Washington Post informó sobre el retraso del partido debido a problemas de control de la multitud. En su artículo “La final de la Copa América se retrasa porque falla el control de multitudes en Miami”, mencionaron que la organización fue insuficiente para manejar la afluencia masiva de espectadores, muchos de los cuales intentaron entrar al estadio sin boletos.
The New York Times, en The Athletic, tituló su cobertura “Caos en la Copa América en Miami”. El medio estadounidense detalló los incidentes violentos que obligaron a la intervención policial. “El partido se vio empañado por escenas de caos cuando los aficionados se enfrentaron con las fuerzas de seguridad fuera del estadio”. Además, destacaron los testimonios de testigos que describieron la situación como “una pesadilla de organización”.
Dedicaron otros artículos a los incidentes titulados “La emotiva despedida de Messi: la final de la Copa América se vuelve caótica” y “Fue inhumano”: por qué la final de la Copa América se retrasó y estuvo peligrosamente cerca del desastre”.
El francés Le Figaro en su artículo “Violencia en el estadio, lágrimas de Messi, despedida de Di María: Argentina vence a Colombia al final de una velada convulsa”, resaltó los hechos de violencia ocurridos durante el encuentro, mientras que BBC Mundo informó sobre los disturbios que marcaron la final en su artículo “Incidentes en la final de la Copa América: caos y violencia en Miami”.
Se llevará a cabo una investigación para identificar a los responsables de los incidentes que retrasaron el inicio del partido por 75 minutos y permitieron que alrededor de 7.000 aficionados sin entradas ingresaran al estadio.
Los incidentes han generado un debate sobre la capacidad de Miami para albergar eventos deportivos de gran magnitud en el futuro, y los medios de todo el mundo se preguntan qué ocurrirá con la Copa del mundo en dos años. “Este estadio albergará siete partidos de la Copa Mundial masculina de 2026: cuatro de la fase de grupos, un partido de dieciseisavos de final, un partido de cuartos de final y el partido por el tercer puesto. El torneo está organizado por la FIFA, el organismo rector del fútbol mundial , en lugar de la Conmebol”, precisó The New York Times.
“Es evidente que se necesitan mejoras significativas antes de que el estadio sea sede de siete partidos del Mundial de 2026. No es solo una cuestión de aumentar la seguridad; también es crucial resolver el problema de las largas colas bajo el calor abrasador, ya que no representan una solución viable”, escribió The Guardian.