Un colombiano de 34 años compareció el lunes ante un tribunal de Londres, acusado de asesinar a dos hombres cuyos restos fueron encontrados en maletas en el suroeste de Inglaterra.
Yostin Andrés Mosquera fue acusado del asesinato de Albert Alfonso, de 62 años, y de Paul Longworth, de 71, dijo la Policía Metropolitana de Londres.
El sospechoso, asistido por un intérprete español, sólo habló para confirmar su nombre, dirección y fecha de nacimiento en una breve audiencia en el Juzgado de Magistrados de Wimbledon. La magistrada Christina Ruiz ordenó que permaneciera detenido hasta la audiencia en el Tribunal Penal Central de Londres el miércoles.
“Usted queda en prisión preventiva ya que este tribunal no tiene poderes para considerar la libertad bajo fianza’”, dijo Ruiz.
La policía dijo que las víctimas habían estado previamente en una relación y aún vivían juntas, y que el sospechoso se había estado quedando con ellas en su apartamento del oeste de Londres.
El subcomisionado adjunto Andy Valentine dijo que “la evidencia reunida hasta ahora no sugiere que hubiera un motivo homofóbico” en los asesinatos.
“Espero que sirva de cierta tranquilidad saber que, aunque las investigaciones aún están en curso y se encuentran en una etapa relativamente temprana, en este momento no estamos buscando a nadie más en relación con los dos asesinatos”, dijo Valentine.
El sospechoso fue arrestado en una estación de tren de Bristol el sábado, tres días después del espantoso descubrimiento de partes de cuerpos en maletas en el Puente Colgante Clifton de la ciudad.
Los agentes de policía llegaron al emblemático puente alrededor de la medianoche del miércoles, diez minutos después de recibir informes sobre un hombre que se comportaba de manera extraña. Pero el hombre, que había viajado hasta allí en taxi, ya se había ido.
La policía encontró más restos en la casa de las víctimas en Londres.
Una de las vecinas de la ex pareja dijo a MailOnline, “Albert y Paul eran unos chicos encantadores. Es devastador. Ambos eran muy amables y educados y sonreían mucho. La última vez que vi a Paul fue hace un mes aproximadamente en el pub y me dijo que se jubilaba. Me dijo: ‘Solo me quedan dos días para ir a trabajar’”.
“Estaba muy contento por ello. Dijo que también tenía previsto asistir al Orgullo en Brighton”, comentó .
“Paul y Albert habían vivido juntos durante años. Eran muy tranquilos. Nunca hubo ningún problema entre ellos. Nunca llamaron a la policía a su apartamento ni nada parecido. No he oído nada fuera de lo normal estos últimos días. Es muy triste”.
(con información de AP)