David Barnea, el jefe del Mossad —la agencia de inteligencia en el exterior de Israel—, viajó este viernes a Doha para recibir la nueva propuesta de Hamas para un alto el fuego en la Franja de Gaza y discutir los detalles con Qatar, uno de los países mediadores y principal interlocutor con los islamistas.
Está previsto que Barnea, que viajó solo sin la delegación negociadora al completo, se reúna con el primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahman al Thani, para discutir la propuesta, que incluiría la liberación de los 116 rehenes que quedan dentro de la Franja de Gaza, según el canal público israelí Kan.
El jefe del Shin Bet —la agencia de seguridad interior—, Ronen Bar; o el mayor general Nitzan Alon, quien supervisa las conversaciones en nombre del Ejército, quienes suelen acompañar a Barnea, no han viajado en esta ocasión, según Kan.
Benjamin Netanyahu, el primer ministro israelí, autorizó ayer jueves el envío de un equipo de negociación a Qatar para analizar la propuesta enviada por Hamas la noche del miércoles, calificada por oficiales israelíes como “esencialmente positiva”, aunque se muestran cautos sobre la posibilidad de un acuerdo. Netanyahu mantuvo anoche una reunión con el gabinete de seguridad, donde los ministros del ala dura del gobierno, Itamar Ben Gvir (Seguridad Nacional) y Bezalel Smotrich (Finanzas), mostraron su desacuerdo con la decisión y amenazaron con abandonar la coalición si Israel llega a un acuerdo con Hamas.
El primer ministro también conversó ayer por teléfono con el presidente estadounidense, Joe Biden, al que le dijo que Israel solo frenará la guerra cuando consiga “todos sus objetivos”, que son “destruir a Hamás y recuperar a todos los secuestrados”.
El jefe del buró político de Hamas, Ismail Haniyeh, presentó la noche del miércoles a los mediadores de Qatar y Egipto “ideas con el objetivo de alcanzar un alto el fuego” en la Franja de Gaza, y fuentes del grupo destacan su espíritu “constructivo y positivo”, pero insisten en que no aceptarán ningún pacto que no conduzca al cese definitivo de las hostilidades.
Mientras se discute una nueva propuesta de tregua en Gaza, la tensión en la frontera entre Israel y Líbano sigue al alza, después de que ayer Hezbollah lanzara su peor ataque desde octubre: más de 200 cohetes y más de 30 drones explosivos a comunidades del norte de Israel, provocando extensos daños e incendios, y matando a un soldado. El ataque responde a la muerte de uno de sus altos comandantes en un bombardeo israelí cerca de Tiro la víspera; mientras la comunidad internacional se afana en lograr una salida diplomática que evite otra guerra entre Israel y Hezbollah, algo que se vería facilitado si se logra un acuerdo en la Franja de Gaza con Hamas.
El líder del Hezbollah, Hassan Nasrallah, se reunió hoy con una delegación de Hamás, encabezada por Khalil Al Hayya, para hablar de la situación en Gaza y de las conversaciones para el cese del fuego. Las partes hablaron de ‘los últimos acontecimientos políticos y de seguridad en Israel y Gaza’, y de las conversaciones para el cese del fuego, señaló el grupo libanés, que comenzó sus ataques hacia el país hebreo el 8 de octubre “en solidaridad con la resistencia palestina en Gaza”.
Desde octubre, Israel y Hamas solo han logrado un acuerdo de tregua durante una semana, en la que fueron liberados 105 rehenes por 240 presos palestinos.
Hezbollah se reúne con una delegación de Hamas
El líder del partido-milicia chií Hezbollah, Hasán Nasralá, se ha reunido este viernes con una delegación del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) encabezada por el ‘número dos’ del grupo en la Franja de Gaza, Jalil al Haya, para abordar el conflicto con Israel y el proceso de conversaciones indirectas con el Gobierno israelí de cara a un posible acuerdo de alto el fuego en el enclave palestino.
Según las informaciones recogidas por la cadena de televisión Al Manar, vinculada a Hezbollah, durante la reunión se han abordado “los últimos acontecimientos a nivel político y de seguridad en Palestina en general, y en Gaza en particular”, así como “la situación en los frentes de apoyo en Líbano, Yemen e Irak”, en referencia a los ataques contra Israel por parte de Hezbollah, los hutíes y milicias proiraníes, respectivamente.
Nasralá y la delegación de Hamas han tratado “las negociaciones en marcha” y “las propuestas para alcanzar el fin de la traicionera agresión contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza”, al tiempo que han reiterado la “coordinación en todos los niveles” para “lograr todos los objetivos deseados” en el marco del conflicto.
El Ejército de Israel desencadenó una cruenta ofensiva contra la Franja tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por Hamás y otras facciones palestinas, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. Las autoridades de Gaza han denunciado más de 38.000 muertos, a los que se suman más de 550 palestinos muertos en Cisjordania y Jerusalén Este en operaciones por parte de las fuerzas israelíes o en ataques perpetrados por colonos.
Hezbollah empezó una oleada de ataques con proyectiles, misiles y drones contra el norte de Israel desde Líbano, lo que ha desatado unos enfrentamientos que se suceden desde entonces. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió recientemente de que el Ejército israelí “está preparado para una acción muy poderosa” en la frontera con Líbano, mientras que el propio Ejército asegura tener ya un plan preparado para ello.
Naim Qassem, sostuvo que una expansión del conflicto derivaría en “devastación y destrucción” en Israel. Uno de los asesores del líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, afirmó el martes que Teherán apoyará “con todos los medios” a Hezbollah en caso de que el Ejército de Israel lance una ofensiva a gran escala contra el grupo en Líbano, mientras que Hezbollah ha condicionado el fin de sus ataques a que Israel y Hamás alcancen un alto el fuego en Gaza.
(Con información de Europa Press y EFE)