Hezbollah disparó más de 100 cohetes a Israel en respuesta al operativo que abatió a su comandante Mohammed Nasser

Según el Ejército israelí, los proyectiles cayeron en campo abierto y no provocaron daños

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Una columna de humo se eleva, en medio de las hostilidades transfronterizas en curso entre Hezbollah y las fuerzas israelíes, en Kiryat Shmona, en el norte de Israel (REUTERS/Ammar Awad)
Una columna de humo se eleva, en medio de las hostilidades transfronterizas en curso entre Hezbollah y las fuerzas israelíes, en Kiryat Shmona, en el norte de Israel (REUTERS/Ammar Awad)

El grupo terrorista Hezbollah anunció este miércoles que disparó más de 100 cohetes contra posiciones israelíes, en represalia por la muerte en el sur del Líbano de uno de sus comandantes en un bombardeo que la milicia chiíta atribuyó a Israel.

Hezbollah se enfrenta desde hace meses con las fuerzas israelíes en la frontera del Líbano con Israel, para apoyar a su aliado palestino Hamas en la guerra en la Franja de Gaza.

“Un comandante de Hezbollah, responsable de uno de los tres sectores del sur de Líbano murió en un bombardeo israelí contra un vehículo en Tiro”, a unos 20 km de la frontera, había indicado una fuente cercana al grupo extremista libanés en una consulta de la agencia AFP. Hezbollah anunció la muerte del “comandante Mohammed Naameh Nasser” y comunicó el fallecimiento de un segundo combatiente.

La milicia chiíta declaró que, “como parte de la respuesta al ataque y asesinato perpetrados por el enemigo”, sus combatientes atacaron “con 100 cohetes Katiusha” a las bases militares de Nafah y Keila en los Altos del Golán, un territorio sirio anexado por Israel.

Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), los proyectiles cayeron en campo abierto y no provocaron daños.

Hezbollah reivindicó también otro ataque con cohetes “Falaq” -de fabricación iraní y hasta el momento reservados para ofensivas de más envergadura que las operaciones rutinarias del día a día- contra instalaciones militares en Kiryat Shmona, en el norte de Israel.

Más tarde, Hezbollah anunció otra tanda de dos acciones más como parte del mismo “proceso de respuesta”, lanzadas en un lapso de apenas seis minutos.

Una de ellas, con “decenas” de cohetes Katiusha, tuvo como objetivo de nuevo el cuartel de Keila, aunque una parte diferente a la atacada en el lanzamiento inicial, mientras que la otra fue lanzada contra el cuartel de Zarit con misiles de alto calibre tipo ‘Burkan”, informó la formación en una serie de comunicados.

El comandante de Hezbollah Mohammed Naameh Nasser murió en un ataque en Tiro
El comandante de Hezbollah Mohammed Naameh Nasser murió en un ataque en Tiro

Nasser, conocido como ‘Hajj Abu Niamah’, murió el miércoles por el bombardeo de un drone israelí contra el vehículo en el viajaba por el área meridional de Al Housh, cerca de Tiro, de acuerdo con información de la Agencia Nacional de Noticias del Líbano (ANN) y del propio grupo chiíta.

La fuente de AFP cercana a Hezbollah afirmó que Nasser tenía el mismo rango que Taleb Sami Abdallah, un comandante muerto el mes pasado en un bombardeo en Juaiyya, a unos 15 km de la frontera israelí.

El ejército israelí declaró el miércoles que Nasser y Abdallah “eran dos de los terroristas más importantes de Hezbollah en el sur del Líbano”.

La muerte de Abdallah provocó que Hezbollah intensificara sus ataques contra objetivos israelíes, lanzando andanadas de cohetes hacia el otro lado de la frontera en los días siguientes.

Los ataques en ambas partes de la frontera israelo-libanesa han causado al menos 495 muertos en Líbano en más de ocho meses, la mayoría combatientes pero también unos 95 civiles, según un recuento de AFP basado en datos del movimiento chiita y de fuentes oficiales libanesas.

De lado israelí, han muerto al menos 15 soldados y 11 civiles, según las autoridades.

Decenas de miles de habitantes de uno y otro lado de la frontera han sido desplazados por los combates. La intensificación de los intercambios de disparos entre el Ejército israelí y Hezbollah en junio y la retórica bélica de los beligerantes hacen temer una guerra total.

(Con información de AFP, EFE y EP)

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