El presidente de Kenia, William Ruto, prometió este martes reprimir firmemente la “violencia y la anarquía” tras las protestas contra un proyecto de aumento de impuestos que desembocaron en violentos enfrentamientos con la Policía y dejaron al menos 17 muertos.
El gobierno anunció por la noche que pidió la movilización del Ejército para hacer frente a la situación. “Daremos una respuesta completa, eficaz y rápida a los actos de traición de hoy”, declaró Ruto. “No es normal, ni concebible, que criminales que fingen ser manifestantes pacíficos puedan desatar el terror contra el pueblo (...) y esperar quedar impunes”, añadió, advirtiendo también “contra los planificadores, financiadores, orquestadores y cómplices de la violencia y la anarquía”.
“Los acontecimientos de hoy marcan un punto crítico en la forma en que respondemos a las amenazas a la seguridad nacional. Nos aseguraremos de que una situación de esta naturaleza no vuelva a ocurrir”, manifestó Ruto en un mensaje televisado a todo el país, recogen medios kenianos. El mandatario prometió castigar a quienes han “secuestrado” las demandas de la población.
Los incidentes de este martes se desencadenaron en el centro financiero de Nairobi, donde se celebraba la tercera manifestación en ocho días del movimiento “Occupy Parliament” (“Ocupar el Parlamento”), que se opone a un proyecto de los presupuestos 2024-2025 que prevé instaurar nuevos impuestos en este país de África oriental.
Los manifestantes forzaron el cordón policial e ingresaron en instalaciones del Parlamento, donde los diputados acababan de aprobar las enmiendas al texto, antes de su aprobación definitiva prevista para antes del 30 de junio.
Varias oenegés, entre ellas Amnistía Internacional Kenia, afirmaron que al menos 17 personas murieron y 86 resultaron heridas este martes en las protestas en Kenia, sin precisar las ciudades donde se produjeron los hechos. Periodistas de AFP vieron tres cuerpos inertes yaciendo en el suelo entre charcos de sangre en las inmediaciones del Parlamento en Nairobi, donde se incendió un edificio.
La principal coalición de oposición, Azimio, acusó al gobierno de “desatar su fuerza bruta contra los hijos del país”.
Estados Unidos, más de una decena de países europeos, el jefe de la Comisión de la Unión Africana -Moussa Faki Mahamat- y el jefe de la ONU -Antonio Guterres- afirmaron estar “profundamente preocupados” por la situación.
“El secretario general está profundamente preocupado por los informes de violencia relacionados con estas protestas”, declaró este martes a la prensa Stéphane Dujarric, portavoz de Guterres. “Está muy entristecido por los informes de muertos y heridos, incluidos periodistas y personal médico”, agregó.
El movimiento “Occupy Parliament” surgió en las redes sociales después de la presentación en el Parlamento el 13 de junio del proyecto de los presupuestos 2024-2025, que prevé instaurar nuevos impuestos como un IVA del 16% al pan y una tasa anual del 2,5% a los vehículos particulares. Para el gobierno, las tasas son necesarias para dar margen de maniobra al país, muy endeudado.
El gobierno anunció el 18 de junio la retirada de la mayoría de las medidas, pero el movimiento pide la eliminación total del texto.
Liderado inicialmente por la “Generación Z” (personas nacidas después de 1997), el movimiento se transformó en una protesta más amplia contra la política de Ruto. Antes de este martes, dos personas murieron en Nairobi durante manifestaciones y varias decenas resultaron heridas.
Kenia, un país de 52 millones de habitantes, es un motor económico de la región, confrontado sin embargo a fuertes tensiones. La inflación alcanzó en mayo un 5,1% interanual, con un alza de los precios de los productos alimentarios y de los carburantes del 6,2% y el 7,8% respectivamente, según el Banco Central.
(Con información de AFP y EP)