El presidente ucraniano Volodimir Zelensky llegó este viernes por la tarde a Suiza, donde durante el fin de semana se desarrollará la Cumbre de Paz Global por la guerra que Rusia lanzó sobre su país en febrero de 2022. El evento se desarrollará en la ciudad de Lucerna y serán “dos días de conversaciones entre naciones distintas y unidas a pesar de todo, con el objetivo común de llevar una paz justa y duradera para Ucrania”.
Participarán cerca de 100 países, entre ellos 57 jefes de Estado, junto con organizaciones internacionales, y será el escenario perfecto para que reafirmen su apoyo a Kiev y “demuestren su liderazgo” mediante su compromiso con la restauración “de pleno derecho la Carta de las Naciones Unidas”, sumó el mandatario.
Así, el Ejecutivo suizo adelantó que algunos de los temas en agenda serán la promoción de un consenso sobre un posible “marco de paz” y la determinación de una “hoja de ruta” sobre cómo abordar esto con las partes enfrentadas, así como la libertad de navegación en el mar Negro, el fin de los bombardeos en infraestructuras de energía nuclear, la liberación de los presos de guerra y el retorno de los niños ucranianos deportados a Rusia, entre otros.
“La Cumbre de Paz permitirá a la mayoría global dar pasos concretos en ámbitos que son importantes para todos en el mundo”, agregó Zelensky y explicó que renunciará a conseguir el apoyo en las exigencias más ambiciosas presentadas en la Fórmula de Paz y, en su lugar, buscará la mayor cantidad de respaldos en otros objetivos.
Algunos de los países que se sumarán al evento son Francia, Argentina y Estados Unidos -que enviará a su vicepresidenta, Kamala Harris, y al asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan-, mientras que otros como China, Brasil y Rusia no estarán presentes.
En el caso de los primeros dos se trata de una decisión voluntaria mientras que en el caso de Moscú, su ausencia responde a que no fue invitado. Putin rechazó por completo la iniciativa de paz que Kiev presentó el pasado año ya que éste exige la retirada de sus tropas del territorio ucraniano y el reconocimiento de la soberanía de todas las regiones que se anexionó en los últimos años.
Sin embargo, en las últimas horas, el líder del Kremlin reiteró que consideraría ordenar un alto el fuego para iniciar un proceso de negociaciones sólo si Zelensky retiraba a sus tropas de los últimos cuatro lugares que conquistó, en 2022: Zaporizhzhia, Kherson, Lugansk y Donetsk. También puso como condición la renuncia de Kiev a ingresar en la OTAN, una aspiración del país que data de hace años.
“Lo haríamos de inmediato”, queremos una “resolución final” de este conflicto, no un “congelamiento”, y estamos “dispuestos a iniciar las negociaciones sin demora”, indicó.
Sin embargo, Zelensky rechazó esta propuesta y la describió como un “ultimátum” territorial ante el que no está dispuesto a ceder.
En medio de estos cruces, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, lamentó que “algunas grandes potencias” no acudan a la cumbre por su alineamiento con Moscú, como es el caso de Lula da Silva y Xi Jinping, quienes rechazaron la invitación por la ausencia de su aliado.
“Lamento que algunas grandes potencias no estén presentes. Es su decisión pero sigue siendo una cumbre importante y un esfuerzo importante que la OTAN y yo apoyamos. Creo que es una plataforma importante para abordar cómo encontrar una paz duradera y justa para Ucrania”, sostuvo e insistió en que, para tales fines, “Rusia tiene que entender que tiene que detener su agresión y creo firmemente que cuanto más fuerte sea nuestro apoyo militar a Ucrania y más comprometidos estemos para el largo plazo, antes Putin entenderá eso y antes podemos tener una paz duradera”.
(Con información de AFP, EFE, Europa Press y Reuters)