Los ministros de Interior de la Unión Europea alcanzaron este jueves un acuerdo político para prorrogar hasta marzo de 2026 la protección temporal que la Unión Europea ya garantizaba hasta marzo de 2025 a los refugiados ucranianos que llegaban a suelo comunitario huyendo de la guerra lanzada por Rusia contra Ucrania.
Los ministros reunidos en Luxemburgo dieron así luz verde a la propuesta presentada a comienzos de semana por la Comisión Europea, aunque la prórroga no será formalmente adoptada hasta finales de este mes de junio, una vez se culmine la revisión jurista lingüística que necesita la revisión de la norma.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, expresó su “satisfacción” en la reunión por la prórroga, al tiempo que recordó que España es el cuarto país de la Unión Europea que más peticiones de protección temporal concedió en esta crisis, con más de 200.000 refugiados ucranianos asentados en el país, según un comunicado del Ministerio.
El mecanismo de protección temporal, que fue creado tras la guerra de los Balcanes pero no se había activado hasta la guerra en Ucrania, garantizó que los desplazados bajo este paraguas pudieran moverse libremente dentro de la Unión Europea en busca de acogida, con derechos como el permiso de trabajo y de estancia garantizados.
La protección fue activada por primera vez en marzo de 2022 y en principio solo podía ser prorrogada anualmente hasta un máximo de tres años, con lo que se estaba agotando el plazo máximo bajo el marco actual.
Sin embargo, el reglamento contemplaba la posibilidad de que “si las razones de la protección persistían”, la Comisión Europea podría proponer nuevas prórrogas de un año para que los Veintisiete decidieran por mayoría cualificada si la aceptaban.
En este contexto, el Ejecutivo comunitario presentó el martes una propuesta para ampliar hasta marzo de 2026 la protección especial que la UE concedía actualmente a cerca de 4,2 millones de personas llegadas desde Ucrania, un tercio de ellas menores de edad.
A la luz de los “ataques continuados” que Rusia dirigía contra infraestructuras civiles y críticas en Ucrania, seguía sin haber condiciones “seguras y estables” para que quienes huyeron de la guerra pudieran regresar al país atacado, por lo que Bruselas defendió que la prórroga era una “respuesta necesaria y adecuada a la situación actual”.
Los datos de Eurostat reflejaron que República Checa y Lituania fueron los socios europeos que más protección temporal ofrecieron de acuerdo a su población, 31 y 27 por cada 1.000 habitantes, si bien las cifras cayeron con respecto a principios de año. En números totales, Polonia con casi un millón de ciudadanos ucranianos acogidos en su territorio fue el principal destino en la UE, aunque en esta ocasión no hubo cifras oficiales de Alemania, que suele ser junto a Polonia quien más protección temporal concedió.
De todos modos en el primer cuarto del año cayó un tres por ciento la concesión de protección temporal, hasta los 196.925, con respecto a las cifras de finales de 2023, puesto que se produjo el regreso de ciudadanos ucranianos a su país, una vez la guerra se concentró principalmente en el este de Ucrania.
(Con información de Europa Press)