El presidente Joe Biden comunicó este viernes a su par ucraniano, Volodimir Zelensky, una nueva ayuda de Estados Unidos por 225 millones de dólares.
“Estados Unidos siempre estará con ustedes”, dijo Biden durante un encuentro en París con Zelensky, quien le agradeció el “enorme apoyo” de Washington en su guerra para defenderse de la invasión rusa.
Ambos se encuentran en Francia con motivo de las ceremonias del 80º aniversario del Desembarco de Normandía, que reunieron la víspera en el noroeste de Francia a líderes occidentales junto a Zelensky, pero sin su par ruso, Vladimir Putin.
Ante la Asamblea Nacional francesa, Zelensky aseguró que “Europa ya no es un continente de paz” y que Putin es un “enemigo común” de Ucrania y Europa.
En presencia del presidente ucraniano, el grupo de armamento francoalemán KNDS oficializó este viernes la creación de una filial en Ucrania para producir equipos y municiones.
Los países occidentales aumentaron su ayuda a Kiev cuando Rusia gana terreno en su ofensiva lanzada en febrero de 2022 para invadir Ucrania.
El jueves por la noche, el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el suministro de cazas Mirage-2000 y el entrenamiento de pilotos ucranianos en Francia a partir de este verano boreal.
“Mañana iniciaremos una nueva cooperación y anunciaremos la venta de los Mirage 200-5, que son aviones de combate franceses que permitirán a Ucrania proteger su suelo y su espacio aéreo. Nuestro deseo es también formar una brigada. Proponemos formar a 4.500 soldados ucranianos, equiparlos y entrenarlos”, dijo en las últimas horas Macron.
El entrenamiento comenzará durante el verano y durará unos cinco o seis meses, por lo que los oficiales estarán listos para volver al frente de batalla para finales de año.
El presidente apuntó que este anuncio lejos está de ser “un factor de escalada” en la guerra, tal como describió Rusia recientemente al apoyo de Occidente, y por el contrario, sostuvo que “en el momento en el que Ucrania tiene un desafío, tenemos que responder como ya lo hemos hecho”.
“Nunca hemos estado en una situación de escalada. No somos nosotros quienes atacamos a Ucrania. Francia quiere la paz y luchamos por ella, pero la paz no es la capitulación de Ucrania”, agregó.
El anuncio se produjo pocos días después de que el presidente asegurara que Kiev debe poder utilizar sus armas para “neutralizar los puntos desde los cuales es atacado”, y en medio de las especulaciones por el posible envío de oficiales al país en guerra para instruir allí mismo a los soldados. A pesar de los pedidos de Zelensky, el último de ellos hace dos días, para un entrenamiento “más rápido y en nuestro suelo”, Macron descartó esta posibilidad por el momento.
“No se trata de ir a la zona de combate a realizar estas formaciones”, explicó al respecto aunque no cerró del todo la puerta. “No hay que tener tabúes sobre este asunto. Estamos trabajando con todos los aliados y actuaremos en base a una decisión colectiva”, continuó.
(Con información de agencias)