Los ataques aéreos conjuntos de Reino Unido y Estados Unidos contra los hutíes de Yemen causaron al menos 16 fallecidos y 35 heridos, dijeron los rebeldes este viernes, el mayor número de bajas que reconocen públicamente en las múltiples ofensivas contra sus ataques contra el transporte marítimo en la zona.
Tres funcionarios estadounidenses, que hablaron bajo condición de anonimato para describir una operación que entonces seguía en marcha, dijeron que el operativo del jueves alcanzó un amplio abanico de instalaciones subterráneas, lanzaderas de misiles y puestos de mando y control, además de un buque y otras instalaciones hutíes. Según dijeron, era la respuesta al reciente incremento de los ataques de la milicia respaldada por Irán contra buques en el mar Rojo y el golfo de Adén debido a la guerra entre Israel y Hamas.
Los aviones de combate estadounidenses F/A-18 que participaron en el operativo despegaron desde el portaaviones USS Dwight D. Eisenhower en el mar Rojo, según las autoridades, y otros buques presentes en la región también participaron.
Pero el viernes en la mañana, los hutíes se centraron en uno de los ataques, que según afirmaron alcanzó un edificio que albergaba la emisora Radio Hodeida y viviendas civiles en la ciudad portuaria. Su canal de noticias por satélite Al Masirah emitió imágenes de un hombre ensangrentado que era evacuado por unas escaleras y de otros atendidos en un hospital.
Según los hutíes, todos los fallecidos y heridos en Hodeida eran civiles, pero The Associated Press no pudo confirmar esa información de inmediato. La fuerza rebelde que controla la capital del país, Saná, desde 2014 suele incluir a combatientes que no van uniformados.
Otros ataques alcanzaron las inmediaciones de Saná, cerca del aeropuerto, y equipos de comunicaciones en Taiz, de acuerdo con la cadena. La falta de información sobre esos lugares podría indicar que se trata de emplazamientos militares hutíes.
“Confirmamos esta brutal agresión contra Yemen como castigo por su posición en apoyo de Gaza, en apoyo de Israel para continuar sus crímenes de genocidio contra la herida, asediada e inquebrantable Franja de Gaza”, dijo el portavoz de los hutíes, Mohammed Abdulsalam, en la plataforma X.
Estados Unidos y Reino Unido iniciaron en enero una campaña conjunta de ataques contra los hutíes, pero las tropas estadounidenses suelen lanzar también operaciones por su cuenta.
Los hutíes han intensificado sus ataques contra la navegación en el mar Rojo y el golfo de Adén para exigir a Israel que ponga fin a la guerra en Gaza, que se ha cobrado la vida de más de 36.000 palestinos. La campaña israelí comenzó tras la incursión insurgente comandada por Hamas sobre el sur de Israel el 7 de octubre, en la que murieron unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y otras 250 fueron capturadas como rehenes.
Desde noviembre, los hutíes han efectuado más de 50 ataques a la navegación, mataron a tres marineros, incautaron un buque y hundieron otro, según la Administración Marítima de Estados Unidos. Esta semana atacaron un granelero que se dirigía a Irán, el principal benefactor del grupo rebelde.
La ofensiva de Londres y Washington se produjo un día después de que, al parecer, un dron MQ-9 Reaper estadounidense se estrelló en Yemen y de que los hutíes reclamasen que le habían disparado un misil tierra-aire. Fue el tercer derribo de este tipo solo en mayo.
(AP)