El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, visitó este viernes la imprenta de la ciudad de Kharkiv (noreste) destruida parcialmente este jueves por un ataque con misil ruso que mató a siete personas y destruyó unos 50.000 libros que habían sido imprimidos en una de las mayores empresas del sector de toda Ucrania.
“Una de las infraestructuras de impresión más grandes de Kharkiv y de toda Ucrania”, dijo Zelensky, “fue destruida y decenas de miles de libros quemados”. “Muchos libros de niños, material educativo, libros de texto… El terror ruso nunca debe quedar sin castigar”, agregó el presidente.
Zelensky dio las gracias a “todos los que ayudan” a Ucrania y pidió trabajar “paso a paso” para “garantizar que el Estado ruso pague las consecuencias de su maldad”.
La imprenta atacada imprimía libros de algunas de las editoriales más importantes de Ucrania. Según una de estas editoriales, es una de las plantas de impresión más grandes de Europa.
En un video, se observó el diálogo del jefe de Estado con los encargados de la imprenta. “Todos los trabajadores que se encontraban en sus lugares de trabajo murieron instantáneamente”, le informó una mujer. “¿Todos murieron aquí?”, preguntó el mandatario y ella respondió que si.
“Entiendo cuál es nuestra tarea. Encontraremos el dinero (para restaurar la imprenta). Desafortunadamente, nadie puede traer de vuelta a la gente”, indicó Zelensky. Otro de los responsables del lugar le dijo que la habían inaugurado hacía solamente cuatro años. “¿Cuatro años?”, preguntó sorprendido Zelensky. “Mis condolencias”, expresó.
En otro orden, el ejército ucraniano indicó este viernes que “detuvo” el asalto lanzado por Rusia hace dos semanas en la misma región de Kharkiv y lanzó “acciones contraofensivas” para repeler a las tropas de Moscú.
El ejército ruso lanzó el 10 de mayo una ofensiva en la región de Kharkiv desde la frontera, conquistando varias localidades y obligando a Ucrania a desplegar refuerzos en la zona.
Tras dos semanas de combates, “las fuerzas de defensa ucranianas detuvieron a las tropas rusas en el sector de Kharkiv y están llevando a cabo acciones contraofensivas”, declaró a la prensa el coronel Igor Projorenko, un responsable del Estado Mayor ucraniano.
La situación en esta región es “difícil” pero “estable y [está] bajo control”, añadió.
Los combates continúan en particular por el control de Vovchansk.
“El enemigo está completamente hundido en los combates de calle en Vovchansk y sufrió pérdidas muy importantes”, aseguró este viernes el general Oleksdandre Syrsky, comandante en jefe del ejército ucraniano.
Moscú envió “reservas” para continuar su asalto, agregó la misma fuente.
Según Kiev, Rusia pretende estirar hasta el punto de ruptura las líneas defensivas de las fuerzas ucranianas, debilitadas tras más de dos años de guerra, la falta de nuevos reclutas y la escasez de armas debido al retraso en los envíos occidentales. Desde el 10 de mayo, cerca de 11.000 civiles huyeron de la región, declaró el jueves el gobernador Oleg Synegubov.
(Con información de EFE, AFP y Reuters)