El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, se sometió a una nueva operación tras ser tiroteado a mediados de semana y seguía en estado grave, indicó el viceprimer ministro y ministro de Defensa, Robert Kalinak.
Fico, de 59 años, recibió múltiples disparos el miércoles mientras saludaba a simpatizantes tras una reunión de su gobierno en Handlova, una antigua ciudad minera, en un atentado que ha conmocionado al país.
Miriam Lapunikova, directora del hospital universitario F.D Roosevelt de Banska Bystrica, a donde el mandatario fue trasladado en helicóptero tras el tiroteo, dijo que se le realizó un TAC y que está despierto y estable en una unidad de cuidados intensivos. El estado del político es “muy grave”, añadió.
Fico volvió a entrar al quirófano para una intervención en la que se retiraron tejidos muertos que habían quedado en su cuerpo, explicó Lapunikova.
“Creo que tendrán que pasar varios días más hasta que sepamos definitivamente la dirección de su evolución posterior”, dijo Kaliniak en declaraciones a reporteros presentes en el hospital.
La de Fico es desde hace años una figura divisiva dentro y fuera de Eslovaquia. Su regreso al poder el año pasado con una plataforma prorrusa y antiestadounidense llevó a sus socios de la Unión Europea y la OTAN a preocuparse porque el país pudiese abandonar el rumbo prooccidental, especialmente en cuestiones relacionadas con Ucrania.
Por otra parte, el hombre acusado de efectuar los disparos fue escoltado por la policía hasta su vivienda el viernes en la mañana en una medida que, según la prensa, formaba parte de un operativo de búsqueda de pruebas.
La televisora estatal, Markiza, mostró imágenes del sospechoso siendo trasladado a su casa en la localidad de Levice y reportó que la policía se incautó de una computadora y varios documentos. La policía no realizó comentarios ya que la fiscalía prohíbe hacer pública la identidad del sospechoso y otros detalles del caso.
Funcionarios gubernamentales habían descrito en la víspera al sospechoso como un “lobo solitario” que no pertenecía a ningún grupo político, aunque antes señalaron que el atentado tenía motivaciones políticas.
Informaciones no confirmadas publicadas en la prensa sugerían que el sospechoso podría ser un jubilado de 71 años, conocido por ser poeta aficionado y que podría haber trabajado como guarda de seguridad en un centro comercial en el suroeste del país.
La oficina presidencial indicó el viernes que se estaba trabajando para organizar una reunión entre los líderes de los partidos con representación en el parlamento el martes. La presidenta saliente del país, Zuzana Caputova, anunció en la víspera la iniciativa junto a su sustituto, Peter Pellegrini, en un intento de reducir las tensiones sociales.
(Con información de AP)