Volodimir Zelensky, el presidente de Ucrania, ha firmado este viernes un proyecto de ley que permite a aquellos condenados por delitos menores servir en el ejército del país a cambio de la posibilidad de libertad condicional al finalizar su servicio. Esta medida refleja los intentos desesperados de Kiev por reponer sus fuerzas después de más de dos años de sangrienta guerra y ante un nuevo avance de Rusia sobre el terreno.
El Parlamento de Ucrania aprobó la citada ley la semana pasada por amplia mayoría. Los analistas políticos no estaban seguros de que Zelensky la promulgaría dada la sensibilidad del asunto. Pero las autoridades ucranianas se encuentran explorando diferentes vías para poder reforzar su capacidad militar y renovar el personal desplegado en el frente, en un contexto marcado por la renovada ofensiva rusa contra Kharkiv.
Esta deja fuera a aquellos condenados por delitos graves, tales como asesinato, violación o por atentar contra la seguridad nacional. Según recogió la agencia UNIAN, también excluye a altos cargos acusados de delitos de corrupción.
Aquellos presos que quieran acogerse a esta medida deberán llevar al menos tres años de prisión antes del fin de su condena y tendrán que solicitar oficialmente su deseo de ingresar al Ejército antes de que el comandante de la unidad militar en cuestión dé su visto bueno. Más tarde, se deberán someter a un examen psicológico y a una revisión médica.
Esta iniciativa surgió como respuesta a una búsqueda por resolver los graves problemas de movilización a los que se enfrenta Ucrania a estas alturas de la guerra. Bajo la ley marcial que aún impera en el país, los hombres que tengan entre 18 y 60 años tienen prohibido abandonar el territorio ucraniano, aunque no ha impedido que muchos de ellos lo hayan hecho.
Ucrania se encuentra ahora cediendo territorio al avance del ejército ruso. Tal como informó The New York Times, el ejército ucraniano necesita urgentemente aumentar el número de tropas en la línea del frente de más de 600 millas si quiere evitar que Rusia rompa sus defensas. Los funcionarios ucranianos han dicho que la medida podría permitir movilizar hasta 20.000 prisioneros.
Ha sido evidente, desde el momento en que Rusia atacó el noreste del país la semana pasada, la escasez de los soldados de Ucrania. Las ofensivas rusas han dejado al ejército ucraniano luchando por desviar tropas de otras áreas del frente y recurrir a sus escasas reservas de personal.
Varios ucranianos demostraron este viernes su apoyo a esta medida, expresando que ayudarían a su país a combatir las fuerzas rusas. Según recogió The New York Times, Olena Vysotska, viceministra de Justicia de Ucrania, dijo a un medio de comunicación ucraniano este viernes que, en una encuesta de convictos ucranianos realizada por el ministerio en abril, 4.500 expresaron su deseo de servir en el ejército a cambio de la posibilidad de libertad condicional.
El Gobierno ha iniciado a su vez otras controvertidas medidas para intentar solucionar este problema, como dejar de prestar servicios consulares a personas en edad militar que residan en el extranjero, a medida que entre los socios de Kiev se baraja también la idea de imponer ciertas restricciones entre los ciudadanos ucranianos que residen en estos países.
De hecho, Zelensky ha firmado este mismo viernes una enmienda al Código de Infracciones Administrativas de Ucrania y al Código Penal para el Fortalecimiento de la Responsabilidad por Infracciones Militares. Así, el mandatario ha dado su visto bueno a aumentar las multas por no acatar la orden de movilización, que ahora pueden alcanzar varias decenas de miles de grivnas.
(Con información de Europa Press)