El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, dijo el domingo que se desarrollaban intensas batallas en la región de Kharkiv, donde miles de personas fueron desplazadas después de una ofensiva rusa.
“Las batallas defensivas y los encarnizados combates continúan en gran parte de nuestra frontera”, dijo el jefe de Estado, añadiendo que algunas aldeas “de hecho pasaron de ser una ‘zona gris’ a una zona de combate”.
Por su parte, el gobernador de Kharkiv informó este domingo que toda la frontera norte de la región ucraniana está bajo fuego ruso “casi las 24 horas del día, dos días después de que Rusia lanzara una ofensiva.
“Todas las zonas de la frontera norte están bajo fuego enemigo casi las 24 horas del día. La situación es difícil”, declaró en redes sociales Oleg Sinegubov.
Además, el gobernador informó en su cuenta de Telegram que 4.073 personas fueron evacuadas desde el viernes, la mayoría en las poblaciones de Chuhuiv y en las inmediaciones de Kharkiv capital —la segunda ciudad del país—, si bien los 1.3 millones de residentes de esta ciudad todavía no está bajo amenaza de desplazamiento.
Mientras las fuerzas ucranianas y rusas se disputan el control de la región, Moscú anunció en las últimas horas la toma de poblaciones aunque Kiev todavía no las da por perdidas.
Según un portavoz de los grupos operativos ucranianos en la zona, el coronel Nazar Voloshin, las fuerzas de Ucrania ahora mismo están lanzando contraataques en Strilecha, Krasne, Morojovets, Oliynikove, Lukiantsi, Gatishche y Pletenivka, escenario de intensos combates desde hace dos días.
El Ministerio de Defensa ruso, sin embargo, asegura que son hasta nueve las poblaciones de Kharkiv cuyo control ha asumido en las últimas 48 horas: Gatishche, Krasnoye, Morojovets y Oleynikovo este domingo, después de que asumiera el control, este pasado sábado, de Borisovka, Ogurtsovo, Pletenevka, Pilnaia y Strelechia.
Ucrania mantiene que no ha perdido ninguna de estas poblaciones durante estos dos últimos días de combate. No obstante, la situación en la zona es “extremadamente difícil”, tal y como reconoció a última hora del viernes el presidente Zelensky.
El jefe del Ejército de Ucrania, Oleksander Sirski, terminó por confirmar este mismo domingo que la situación en la región de Kharkiv empeoró “significativamente” en las últimas horas”.
“Hay batallas en curso en las zonas fronterizas a lo largo de la frontera estatal con la Federación Rusa”, indicó el jefe del Ejército antes de admitir que las fuerzas de Moscú consiguieron “éxitos parciales” en algunas áreas.
Sirski además aseguró que “los intentos de romper nuestras defensas fueron detenidos”.
“Las fuerzas de defensa ucranianas están haciendo todo lo posible para mantener las líneas y posiciones defensivas”, añadió el jefe militar en su cuenta de Telegram.
Por su parte, el alcalde de Kharkiv, Igor Terejov, dijo que la ciudad “está en calma, no vemos gente marchándose”.
Las autoridades de Kiev llevaban semanas advirtiendo que Moscú podría intentar atacar las regiones fronterizas del noreste, mientras Ucrania sigue esperando la llegada de ayuda occidental y sufre de una escasez de soldados.
Estados Unidos anunció un nuevo paquete de ayuda militar de 400 millones de dólares para Kiev horas después de comenzar la nueva operación rusa.
Ataques nocturnos
Los drones de los servicios de inteligencia militares de Ucrania (GUR) atacaron en la noche del sábado objetivos industriales en las regiones rusas de Volgogrado, Kaluga y Lipetsk, según informó una fuente del GUR al diario Ukrainska Pravda.
Uno de los objetivos fueron los depósitos de combustible en Liudinovo, en la región de Kaluga, unos 300 kilómetros al sur de Moscú.
Los drones también atacaron la planta metalúrgica de Novolipetsk, unos 400 kilómetros al norte de la frontera ucraniana, así como la refinería de petróleo de Lukoil en Volgogrado, unos 400 kilómetros al este de Ucrania.
Esta última, con una capacidad de 14,8 millones de toneladas, ya había sufrido daños por un ataque similar la noche anterior, que provocó según fuentes ucranianas la desconexión de siete refrigeradores y desperfectos en la chimenea de uno de los hornos.
“Estos objetivos militares fueron atacados con drones de fabricación ucraniana. La labor continuará”, declaró la fuente del GUR a Ukrainska Pravda.
(Con información de AFP y Europa Press)