El ex presidente de la federación de fútbol de China fue condenado a cadena perpetua por aceptar sobornos por un total de 11 millones de dólares, informó el martes un medio estatal, en el marco de una gran campaña contra la corrupción en este deporte.
Un tribunal en la provincia de Hubei, en el centro de China, sentenció a Chen Xuyuan “a cárcel de por vida por aceptar sobornos”, declaró el diario People’s Daily, controlado por el Partido Comunista.
Entre 2010 y 2023, Chen se aprovechó de sus posiciones en la federación y otros organismos “para aceptar ilegalmente sumas de dinero de otra gente por un total de 81,03 millones de yuanes”, unos 11 millones de dólares, indicó este periódico.
El dirigente deportivo pretendió obtener “ventajas indebidas para varios clubes de fútbol y asociaciones de fútbol locales” amañando partidos o ascensos o imponiendo sanciones a los árbitros.
La información de este medio asegura que los sobornos eran “particularmente enormes” y que sus acciones socavaron “la competencia leal y el orden en el sector del fútbol”.
Chen se convirtió en presidente de la Asociación China de Fútbol en 2019, pero antes había ostentado otras posiciones en este deporte.
En enero confesó en un documental televisivo que había aceptado dinero de personas que deseaban un trato de favor.
“Los aficionados pueden aceptar el hecho de que la situación del fútbol chino es mala”, afirmó Chen en ese documental. “Pero no pueden perdonar la corrupción”, añadió.
Campaña anticorrupción
El presidente chino, Xi Jinping, es un aficionado reconocido del fútbol y ha admitido su sueño de que el gigante asiático organice y gane eventualmente una Copa del Mundo.
Pero desde su ascenso al poder hace una década ha emprendido una campaña en contra de la corrupción que ha afectado también la industria de este deporte.
Una decena de cargos y ejecutivos de la federación han caído en años recientes, entre ellos el mismo Chen.
Este martes se esperan los fallos de cuatro grandes casos de corrupción vinculados con el fútbol, según la agencia de noticias oficial Xinhua.
Uno de ellos afecta al ex seleccionador nacional Li Tie, cercano al ex presidente de la federación.
En el mismo documental emitido en enero, el ex centrocampista chino, que llegó a jugar por el Everton de la Premier League inglesa, admitió que pagó 421.000 dólares en sobornos para asegurarse el cargo y que había ayudado en el amaño de partidos cuando era entrenador de clubes.
“Había algunas cosas entonces que eran prácticas habituales en el fútbol”, dijo.
Otro caso que sacudió el fútbol chino fue el del internacional surcoreano Son Jun-ho, detenido en el gigante asiático en mayo.
Beijing dijo entonces que el centrocampista fue arrestado “bajo sospechas de aceptar sobornos de empleados no estatales”, sin dar más detalles.
El Ministerio de Relaciones Exteriores surcoreano anunció el lunes que había sido liberado y regresado al país.
Son jugaba en el Shandong Taishan de la Superliga China desde 2021 y participó en tres de los cuatro encuentros disputados por Corea del Sur en el Mundial de 2022 en Qatar.
(AFP)