Cuatro navíos militares de Estados Unidos con unos 100 soldados a bordo partieron este martes rumbo a la costa de la Franja de Gaza, cargando materiales para construir un puerto temporario que permita distribuir más ayuda humanitaria.
La iniciativa es parte de los esfuerzos de Estados Unidos por aumentar la asistencia a los civiles en el asediado territorio palestino, donde la ayuda que llega en camiones se vio reducida en medio de intensas operaciones militares israelíes y existe actualmente una grave escasez de alimentos, agua y medicinas.
El barco principal de la misión -un descomunal buque gris de apoyo logístico- se alejó de la base militar en Virgina tocando la Marcha Imperial de la película de ciencia ficción Star Wars por sus altoparlantes.
Le siguieron atrás otros tres barcos de menor porte, que también harán la travesía de casi 30 días hasta el este del Mediterráneo.
Las nuevas instalaciones involucran una plataforma en el mar para transferir cargas de asistencia humanitaria desde grandes barcos a otros menores, y un muelle para descargar la ayuda en tierra firme.
Se espera que el proyecto quede operativo “en un plazo de 60 días”, declaró a periodistas el brigadier general Brad Hinson.
“Una vez que la misión esté operativa con todas sus capacidades, podremos llevar a la orilla hasta dos millones de raciones de comida por día”, aseguró.
Las autoridades estadounidenses aseguraron que la misión no implica desplegar “tropas en el terreno”, aunque los militares sí se acercarán al territorio costero durante la construcción del muelle, que debe anclarse a la orilla.
Hinson no reveló aspectos de seguridad ni con qué asistencia contarán para ese anclaje.
El conflicto actual estalló hace más de cinco meses con el ataque de terroristas del grupo islamista palestino Hamas en suelo israelí, en el que murieron unas 1.160 personas, sobre todo civiles, según un recuento de la agencia AFP a partir de datos israelíes.
En respuesta, Israel lanzó una campaña militar de represalia que ha dejado de momento 31.112 muertos solamente en Gaza, según datos de los terroristas de Hamas, que gobiernan el enclave palestino.
Para intentar paliar la crisis humanitaria, un primer barco fletado por la ONG española Open Arms y cargado con 200 toneladas de víveres zarpó este martes desde Chipre hacia Gaza, por un corredor marítimo anunciado por la Unión Europea (UE).
Estados Unidos y otros países también han efectuado lanzamientos de paquetes con agua y comida desde aviones.
El portavoz del Departamento de Defensa norteamericano, Pat Ryder, detalló que este martes, junto con la Real Fuerza Aérea Jordana, las fuerzas estadounidenses distribuyeron unas 5.280 libras (unos 2.400 kilogramos) de alimentos, incluida harina, arroz, pasta y comida enlatada.
Pero el envío de ayuda por mar o desde el aire no pueden sustituir los suministros por vía terrestre, insisten la ONU y distintas oenegés.
El lunes, el Departamento de Estado había destacado que aunque el Gobierno de Benjamín Netanyahu ha dado pasos para permitir la entrada de ayuda humanitaria, no ha hecho lo suficiente, y le instó por ello a hacer más.
Naciones Unidas estima que una cuarta parte de la población en la Franja de Gaza está en riesgo de morir de hambre por la catástrofe humanitaria desatada por la ofensiva israelí.
(Con información de AFP y EFE)