Francia retirará la patria potestad a un padre o madre de un niño en casos de condena por incesto o por violencia contra el menor o contra el otro progenitor, tras el voto final este martes del Parlamento.
“Hoy damos prioridad al interés general y, sobre todo, al interés superior del niño”, indicó la diputada socialista Isabelle Santiago, quien lanzó hace más de un año esta proposición de ley.
La principal medida es la retirada automática de la patria potestad del progenitor condenado por agresión a su hijo o a al otro padre o en caso de incesto, salvo decisión contraria del juez.
“Es nuestro deber proteger al menor víctima de sus padres agresores, porque el hogar debe ser siempre un lugar donde pueda crecer en paz y seguridad”, dijo el ministro de Justicia, Éric Dupond-Moretti, asegurando que la legislación francesa sobre estas cuestiones se convertirá en “la más completa y protectora de Europa”.
Las autoridades podrán suspender también la patria potestad de manera provisional durante las actuaciones judiciales contra un progenitor por un delito contra el otro o por agresión sexual contra su hijo.
Los grupos de defensa de los derechos de la infancia han criticado las lagunas del sistema judicial que hasta ahora dejaban a los niños a merced o incluso bajo la custodia de un presunto agresor durante una larga investigación.
Por otro lado, durante los debates parlamentarios del proyecto también hubo discrepancias entre la Asamblea Nacional y el Senado sobre la posible ampliación de la suspensión de la patria potestad a los casos de “violencia deliberada contra el otro progenitor que provoque una incapacidad laboral total superior a ocho días, cuando el hijo estuviera presente en el momento del incidente”.
Finalmente, los diputados acordaron eliminar esta medida del texto. “Damos a los tribunales penales todas las herramientas necesarias para abordar esta cuestión fundamental y proteger mejor a los niños”, declaró la senadora Marie Mercier
Según una comisión independiente impulsada por el gobierno en 2021, Ciivise, 160.000 niños son víctimas cada año de agresión sexual, un 97% de los agresores son hombres (en un 27% de casos, los padres).
En su informe final en 2023, la comisión recomendó suspender la patria potestad y los derechos de visita y de acogida de un padre investigado por violar o agredir sexualmente a su hijo, y la retirada sistemática en caso de condena.
Respecto a la violencia conyugal, las fuerzas del orden registraron en 2022 unas 244.300 víctimas, en su gran mayoría mujeres.
(Con información de AFP)