Un vehículo impactó contra las principales puertas de acceso del Palacio de Buckingham durante el inicio del pasado fin de semana. Este hecho llevó a la policía de Londres a actuar de manera inmediata, deteniendo al conductor “en la escena bajo sospecha de daños criminales,” según declaró la policía en un comunicado citado por el New York Post.
Este suceso ocurrió alrededor de las 2:33 a.m. del sábado (hora local), frente a la residencia real en Westminster, centro de Londres, un lugar icónico y de gran importancia para el Reino Unido y sus ciudadanos. A pesar de la gravedad del accidente, las autoridades confirmaron que no se reportaron heridos, según publicó The Washington Post.
Un testigo, que prefirió permanecer anónimo, proporcionó un relato directo de los acontecimientos, afirmando haber escuchado un fuerte estruendo antes de ser testigo de cómo la policía detenía rápidamente al hombre. “Escuché un fuerte golpe y vi que el auto se había estrellado contra el Palacio de Buckingham”, mencionó el testigo a medios locales.
Este incidente ha suscitado una amplia cobertura mediática, aunque la BBC informó que no se está tratando como un acto relacionado con el terrorismo. Por su parte, Reuters comunicó que ningún miembro de la familia real se encontraba en la residencia en el momento del choque. Tras el accidente, las imágenes capturadas dan muestra de las históricas puertas ahora cubiertas con tablones de madera, evidenciando el impacto del suceso en uno de los íconos arquitectónicos y culturales de la capital británica.
El Palacio de Buckingham ha servido como la residencia oficial de los soberanos del Reino Unido desde 1837 y actualmente funciona como el cuartel general administrativo de la monarquía. El Rey Carlos, quien tiene su oficina en el palacio, reside actualmente en Clarence House, a una corta distancia a pie del emblemático edificio.
Este no es el primer incidente de seguridad relacionado con la residencia real; hace apenas un año, días antes de la coronación del Rey Carlos III, un hombre fue detenido por arrojar varios objetos, incluidos cartuchos de escopeta, dentro de los terrenos del palacio, según informó la Policía Metropolitana de Londres.
Tras el incidente, el conductor fue detenido por oficiales armados y trasladado a un hospital, donde fue retenido bajo la Ley de Salud Mental. La policía londinense indicó que, después de su evaluación, el individuo fue liberado bajo fianza.
Mientras tanto, la entrada al palacio fue asegurada con vallas metálicas y las puertas se encuentran cubiertas, una imagen que llamó la atención de los turistas que paseaban bajo la lluvia este domingo 10 de marzo.