El Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM) informó que este lunes que lanzó un nuevo paquete de ayuda humanitaria sobre el norte de la Franja de Gaza, en un intento por ofrecer asistencia a los civiles que se han visto afectados por la ofensiva militar israelí, que ha dejado ya más de 31.100 muertos.
Este último lanzamiento se llevó a cabo sobre las 2:17, hora local de Gaza, sobre el norte del enclave palestino, “una zona de gran necesidad”, tal y como detalló el CENTCOM en un mensaje publicado en su cuenta de la red social X.
El Ejército de Estados Unidos dispuso de varios aviones C-130 de la Fuerza Aérea, desde donde soldados “especializados” en este tipo de operaciones han lanzado más de 27.600 paquetes de comida y 25.900 botellas de agua.
El CENTCOM afirmó que este tipo de entregas de ayuda humanitaria por parte del Gobierno de Estados Unidos y sus socios buscan “aliviar el sufrimiento humano” que padece la población de Gaza y que seguirán produciéndose en el futuro.
La semana pasada una de estas entregas resultó fatal para cinco personas, que murieron después de que fueran golpeadas por estos paquetes tras fallos en los paracaídas. Hamas tildó de “inútil” estas iniciativas y ha pedido un alto el fuego inmediato y que Israel permita la entrada de ayuda humanitaria.
EEUU critica que Israel no ha hecho lo suficiente
Estados Unidos consideró este lunes que Israel no ha hecho lo suficiente para la entrada de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza, e instó al Gobierno de Benjamín Netanyahu a hacer más.
“Hemos visto al Gobierno de Israel dar pasos para permitir la entrada de ayuda humanitaria, pero no ha hecho lo suficiente”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en una conferencia de prensa.
No obstante, recordó que las autoridades israelíes han dicho que implementarán un plan de ayuda humanitaria.
“No solo nos lo han dicho a nosotros, lo han dicho públicamente, No hemos visto todavía tal plan, pero antes de juzgar ese plan y ver si es posible o creíble, esperemos y veamos que han decidido”, sostuvo Miller.
El pasado jueves, en su discurso sobre el estado de la Unión, el presidente estadounidense, Joe Biden, exigió a Netanyahu que no use la ayuda humanitaria como una “moneda de cambio”.
Y este fin de semana, en una entrevista en la cadena MSNBC, advirtió que aunque “nunca abandonará a Israel” y seguirá ayudándole, existe “una línea roja” sobre los ataques que se podrían presentar contra la ciudad de Rafah, donde se refugian más de 1,3 millones de palestinos.
“Creemos que no debería tener lugar ninguna operación militar en Rafah si no hay un plan creíble y factible para proteger la seguridad del más de millón de personas que se refugian allí. Y no hemos visto tal plan”, insistió este lunes en una conferencia de prensa la subportavoz de la Casa Blanca, Olivia Dalton.
Biden y Netanyahu, según apuntó, no han hablado desde mediados de febrero. “Pero por supuesto nuestros equipos están en contacto”, señaló precisando que desde el ataque de Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre los dos mandatarios han hablado más de una docena de veces.
(Con información de Europa Press y EFE)