Israel identificó al tirador que, más temprano este jueves, abrió fuego en una gasolinera cerca del asentamiento de Ely, en Cisjordania, y mató a dos ciudadanos israelíes.
Basándose en informes palestinos, la agencia de seguridad interna, Shin Bet, informó que el sujeto, que fue abatido en la escena, era Muhammad Manassera, un oficial de 31 años de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y residente del campo de refugiados de Qalandiya, en las afueras de Jerusalén. Asimismo, sumó que había estado preso en una cárcel israelí entre 2018 y 2019 por cargos relacionados con el uso de armas.
El ataque terrorista dejó dos víctimas, ambos hombres, uno de 20 y el otro de 40 años, sumó el servicio de emergencia Magen David Adom (MDA). Tras el incidente, se activaron las alarmas por supuesta infiltración en la zona y las autoridades montaron un cordón de seguridad pero no se reportaron otros incidentes o más víctimas.
No obstante, este no fue el primer atentado que se produjo en el sitio. En junio de 2023 dos miembros de Hamas habían llevado a cabo un atentado que también acabó con la vida de civiles israelíes, en aquel caso, cuatro de ellos. Como respuesta, días más tarde, el Ejército israelí lanzó una operación militar a gran escala en Yenín, uno de los bastiones de las milicias palestinas en el norte de Cisjordania, con el objetivo de desbaratarlas.
La ofensiva de este jueves se dio apenas un día después de que se conociera que varias personas murieron en Gaza tras un incidente producido en medio de las maniobras de entrega de ayuda humanitaria.
El episodio se desarrolló cerca de las cuatro de la madrugada, cuando unos 30 camiones cargados de productos llegaron a la costa de la ciudad de Gaza para abastecer a los palestinos del barrio de Rimal. Una vez superado el puesto de control israelí, según confirmaron imágenes aéreas, miles de personas se abalanzaron sobre el vehículo.
Como suele ocurrir en estos casos, la versión de Hamas y de Tel Aviv sobre lo que ocurrió después no coinciden. Los terroristas acusan al Ejército de abrir fuego contra la multitud mientras las Fuerzas de Defensa aseguran que, producto de esta “estampida”, muchos de estos civiles murieron, incluso atropellados por los camiones. Israel aseguró que diez de ellos perdieron la vida a causa de los disparos de advertencia al aire que las tropas lanzaron, aseguraron.
“Los camiones llenos de ayuda se acercaron demasiado a unos tanques del Ejército que estaban en la zona y la multitud, miles de personas asaltaron los camiones”, comentó un testigo a la agencia AFP mientras que el portavoz de la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu, Avi Hyman, sumó que “los camiones de ayuda se vieron desbordados por la gente que los intentaba saquear y los conductores se abalanzaron sobre la multitud de personas, matando finalmente a decenas de personas”.
A la par, el Ejército informó de más avances en su ofensiva sobre el enclave palestino. En las últimas horas, las tropas celebraron su llegada hasta la “Habitación 6″, el escondite subterráneo de Yahya Sinwar. Se trata de un espacio diseñado para resistir asedios, completamente equipado con personal militar, líneas de comunicación y sistemas de seguridad, y perfecto para pasar largos períodos de tiempo, de ser necesario.
De todas maneras, al irrumpir en este búnker, las FDI no lograron dar con el líder terrorista ya que éste logró escapar a tiempo.