El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió este miércoles de la “extremadamente difícil” situación de Ucrania en el frente de batalla, a pocos días de que se cumplan dos años desde el inicio de la guerra de Vladimir Putin y tras la significativa salida de las tropas de Kiev de Avdiivka ante la falta de capacidades para defender sus posiciones.
“La retirada de Ucrania de Avdiivka demuestra que la situación en el campo de batalla es extremadamente difícil pero los ucranianos han superado las expectativas una y otra vez y la OTAN sigue estando al lado de Ucrania”, declaró en una rueda de prensa junto con el primer ministro de Georgia, Irakli Kobajidze.
En su mensaje, Stoltenberg reiteró que la Alianza se mantendrá firme junto al país en guerra el tiempo que sea necesario, sobre todo en estos momentos en los que Estados Unidos enfrenta dificultades para seguir con sus envíos de armamento, clave en las ofensivas. Así, reivindicó las asistencias militares anunciadas por los aliados en el último tiempo por miles de millones de euros, que incluyen sistemas de defensa antiaéreos, munición de artillería y equipamiento para aviones de combate F-16.
El pasado sábado, el presidente ucraniano Volodimir Zelensky dio a conocer la noticia de que, ante la falta de estas piezas clave para atacar y defenderse del enemigo y sus feroces maniobras, se ordenó la salida de los soldados de este frente. “La retirada fue una decisión justa para salvar soldados”, dijo mientras el general Tarnavski sumó que “en la situación en la que el enemigo avanza sobre los cadáveres de sus propios soldados y tiene diez veces más obuses, esta es la única solución buena”.
Sin embargo, este anunció llevó a que en ciudades vecinas se reavive el fantasma de una ocupación rusa. Con esta victoria, las Fuerzas Armadas de Moscú intentan afianzarse en el Donbás, redoblando sus esfuerzos para avanzar sobre otros bastiones ucranianos.
“El enemigo cuenta todavía con mucha infantería y equipamiento bélico, y también implica a la aviación” en sus “constantes intentos de asalto”, explicó el subcomandante de la Tercera Brigada del Ejército ucraniano, Maksim Zhorin, mientras las autoridades ya comenzaron con la evacuación de los residentes hacia zonas más seguras.
“La gente tiene miedo, mi hija me pide todos los días que nos vayamos”, comentó Olena Obodets, una mujer de 42 años.
La OTAN defiende la soberanía de Georgia
Junto con su expreso apoyo a Ucrania, Stoltenberg aprovechó la visita de Kobajidze a los cuarteles generales de la Organización en Bruselas para recordar a toda la comunidad internacional que Georgia es “un estrecho socio de la OTAN” y, por tanto, “apoya plenamente su soberanía e integridad territorial”, en referencia a los territorios que, desde la guerra de 2008, están bajo presencia militar rusa.
“La OTAN sigue pidiendo a Rusia que dé marcha atrás en el reconocimiento de los territorios gregorianos como Estados independientes. Cualquier amenaza por parte de Rusia de anexionarse las regiones de Georgia es inaceptable”, dijo por su parte el mandatario.
A la par, el Secretario General destacó la cooperación en materia militar vigente y pidió “intensificar” las reformas pertinentes para que la nación -candidato a la adhesión- se incorpore al bloque de la Unión Europea.
“Ahora es importante que Georgia continúe e intensifique las reformas internas y defienda los valores democráticos. Queremos ver a Georgia avanzar en la dirección correcta, hacia más democracia y prosperidad, hacia la plena integración de la familia euroatlántica”, concluyó.
(Con información de Europa Press)