El régimen de China anunció este domingo que intensificará las patrullas en las aguas cercanas a Taiwán, tras la muerte de dos pescadores chinos en un incidente con una embarcación de la guardia costera de Taiwán.
Según las autoridades chinas, la embarcación con cuatro tripulantes volcó el miércoles cerca de las islas Kinmen cuando era perseguida por los guardacostas taiwaneses. Todos sus ocupantes cayeron al mar, dos murieron ahogados y los supervivientes fueron arrestados.
“La Guardia Costera de Fujian reforzará su presencia policial en el mar y realizará patrullas periódicas en las aguas que rodean Xiamen y Kinmen”, declaró Gan Yu, portavoz de los guardacostas chinos.
China expresó su “enérgica condena” por el incidente e instó a las autoridades de la isla a liberar a los supervivientes de la tripulación.
Los pescadores de Taiwán y China suelen pasar por una zona donde se han disparado las tensiones ante el aumento significativo de los barcos chinos, incluidas dragas y pesqueros.
Los habitantes de Kinmen se han quejado del ruido y la contaminación provocada por las embarcaciones y han denunciado pérdidas en su medio de vida, la pesca.
La muerte de los pescadores fue un suceso inusual pese al nivel de actividad china en las aguas cerca de Kinmen, que está más cerca de China que de la isla principal de Taiwán.
La guardia costera taiwanesa dijo el miércoles que dos de cuatro pescadores chinos murieron tras el naufragio de su embarcación. Indicó que su barco pescaba a una milla náutica del archipiélago, que Taiwán ha declarado zona restringida. Los otros dos sobrevivientes se encontraban bajo custodia taiwanesa.
China ha condenado el suceso con contundencia y culpado al Partido Progresista Democrático, que gobierna Taiwán, de la muerte de los pescadores. También negó la existencia de aguas “restringidas”.
Taipéi responsabilizó a China y afirmó que el barco estaba “en aguas prohibidas” en la costa de las islas Kinmen, un territorio administrado por Taiwán que está situado a pocos kilómetros de la ciudad china de Xiamen.
China y Taiwán están separadas de hecho desde el fin de la guerra civil en 1949, cuando las tropas comunistas derrotaron a las nacionalistas, que salieron del continente.
Pero Pekín considera a Taiwán, de 23 millones de habitantes, como una provincia que forma parte de su territorio y proclama su intención de recuperarlo tarde o temprano, por la fuerza si fuera necesario.
El líder del Partido Democrático Progresista (PDP), Lai Ching-te, considerado por Pekín como un “separaratista”, ganó las elecciones presidenciales de enero en Taiwán.
El incidente marítimo se produjo en un momento de intensificación de las tensiones en el estrecho de Taiwán.
El presidente chino, Xi Jinping, reitera en los últimos años su voluntad de una “reunificación” de China y Pekín ha aumentado la presión militar sobre el archipiélago.
La Oficina de Asuntos de Taiwán, una agencia china, prometió nuevas medidas el domingo, sin dar más detalles.
“El territorio continental se reserva el derecho a tomar más medidas, y todas las consecuencias serán asumidas por Taiwán”, dijo Zhu Fenflian, vocero del organismo.
(Con información de AFP y AP)